CLASIFICACIÓN MUNDIAL | GEORGIA - ESPAÑA
En Georgia se juega sin red
España está obligada a ganar tras el tropiezo del jueves con Grecia. Busquets apunta a titular en la media de la Selección. Gerard Moreno será duda hasta última hora.
Puede ser similar al partido que hemos jugado contra Grecia, puede ser un partido parecido". No lo digo yo, lo dice Luis Enrique, y la frase no hace sino rescatar el tedio y el pesimismo con el que el jueves nos fuimos a la cama. Sin embargo, lo único importante esta tarde en Tiflis es el resultado. Da igual si nos cuesta abrir la lata, si Georgia se echa atrás con sus once jugadores. Lo único vital hoy es sumar los tres puntos, porque de lo contrario se complicaría de manera inesperada nuestro caminar hacia el Mundial de Qatar 2022 (sigue el partido en directo en As.com).
Nos hemos acostumbrado al caviar y cuesta imaginarse a La Roja en apuros rumbo a una gran cita internacional. Desde el Mundial de Alemania 2006, España no comenzaba unas eliminatorias sin victoria. Entonces, el empate ante Bosnia-Herzegovina nos obligó a acudir a la repesca. Mejor cambiemos de tema, aunque para ello es obligatorio que España cambie de juego. Hay que mejorar en ataque respecto al duelo del jueves en Granada, evitar ese fútbol horizontal que no conduce a buen puerto, pues ante Grecia sólo disparamos dos veces a puerta. El experimento Llorente, con el jugador del Atlético como lateral derecho, no dio el resultado apetecido. La pólvora del rojiblanco parece evaporarse en ese puesto, por lo que quizá Porro sea hoy el elegido. Busquets podría llevar la manija en detrimento de Rodri, mientras que habrá que ver si la frescura que mostró Bryan Gil en los minutos que jugó ante Grecia le valen para ganarse la titularidad. Difícil. Arriba, mientras, Luis Enrique aguardará hasta última hora para deshojar la margarita de Gerard Moreno, baja el jueves por una contractura en los isquiotibiales. El gol ante los helenos es el mejor aval para que Morata vuelva a ser el nueve de La Roja.
La Selección española viene de un empate que supo a nada, mientras que Georgia afronta la cita tras una derrota que supo a mucho. Cayó por la mínima en Suecia (1-0), pero la valentía en el planteamiento de Willy Sagnol deparó elogios en la prensa georgiana. El encuentro en Solna supuso el debut del francés al frente de la selección caucasiana, que acarició la clasificación para la Eurocopa 2020 pero cayó en el playoff final frente a Macedonia. Kvaratskhelia tuvo que ser sustituido al descanso ante los suecos, pero parece recuperado de sus molestias y todo indica que Sagnol lo alineará de inicio. Buena parte de las opciones georgianas pasan por las botas de este centrocampista ofensivo de 20 años del Rubin Kazan. Kankava, mientras, es su Sergio Ramos: un internacional de 35 años que desde la posición de pivote da estabilidad al equipo, una roca que suma 95 partidos con su selección.
En el seno de La Roja tienen claro que no será un partido cómodo. Los dos últimos resultados ante Georgia, en la fase de clasificación para el Mundial 2014, así lo hacen ver: ganamos sin brillantez (0-1 y 2-0). Y otro dato que ofrece la estadística: España perdió ante Georgia en 2016 en un amistoso en Getafe que servía de preparación para la Eurocopa.
El público es a la vez la noticia buena y la mala del partido. La buena, porque en las gradas del Estadio Nacional se darán cita unos 15.000 aficionados (las autoridades permiten un tercio del aforo), lo cual sabe a gloria ahora que acabamos de cruzar la frontera de un año de pandemia. La mala, que esas voces juegan a favor del rival. Un aliento extra desde las tribunas hacia una selección revolucionada por Sagnol pero que, no lo olvidemos, ocupa el puesto 89 en el ranking FIFA. Un rival netamente inferior a España (sexta en esa lista) siempre que logremos que el balón vaya hacia el norte en lugar de al costado.