Los Anexos aprueban con nota en la primera fase
Tanto el Real Valladolid Promesas como los dos equipos juveniles cumplieron los objetivos propuestos para la primera parte de la temporada.
En una temporada tan atípica como la actual, en la que solo aquellos valientes que se apostan en el fondo sur de Los Anexos para seguir los partidos de los juveniles, que se disputan a puerta cerrada, la cantera del Real Valladolid sigue dando pasos adelante. Así lo constata el hecho de que los tres equipos que se encuentran en competición han cumplido con nota sus objetivos para la primera fase, culminada el pasado fin de semana.
El Promesas, el principal exponente de las categorías inferiores blanquivioletas, consiguió hacerse un sitio en la futura Primera RFEF con todo merecimiento, quizás no por lo estético de su fútbol, lejos del expuesto la pasada campaña, pero desde luego que sí por solidez. El virtual salto de categoría llegó, además, con una semana de anticipo, y con la rúbrica posterior de un último triunfo que permite acceder a la segunda fase con 30 puntos y posibilidades de repetir playoff a Segunda, puesto que solamente el Burgos pasa a esta a más de un partido de distancia.
Por su parte, el Juvenil de Baptista disputará la segunda fase por el campeonato, después de mostrarse muy superior a todos sus rivales de la primera, a excepción del Alcorcón del vallisoletano David Rodríguez y del exblanquivioleta Capdevila. El primer equipo juvenil pasa con 39 unidades, la tercera mejor puntuación de los diez competidores, siendo solo superado por los dos 'grandes': los difícilmente alcancables Real Madrid (48 puntos) y Atlético de Madrid (44).
La pandemia y la alteración de los planes competicionales han provocado que, aunque se haya logrado el objetivo de pasar como campeones, los blanquivioletas no vayan a poder disputar la Copa del Rey, suspendida por la RFEF después de haber diseñado una ampliación de la misma al principio del curso. De haberse jugado, habrían pasado los dos primeros. Sin ella, lo que queda es crecer, pues la Copa de Campeones parece difícilmente alcanzable.
A esto hay que añadirle la suspensión del Europeo sub'19 que se iba a jugar en julio en Rumanía, y que aspiraban disputar varios canteranos del Pucela. No en vano, Castri formó parte de la última preselección y técnicos de la Federación han estado siguiendo a Aceves, Diego Moreno y Maroto, a quienes David Gordo, seleccionador sub'17, estuvo recientemente viendo in situ en Los Anexos, sin perder de vista a Slavy, miembro destacado de la generación del 2002. De ellos, Aceves y Maroto, del 2003, todavía podrían estar en la siguiente Euro.
El tercer equipo en discordia, el Juvenil B, también ha sido campeón de su subgrupo de Liga Nacional. Con dos cadetes como Koke y Garri instalados en el once, Aníbarro y Chuky son los principales exponentes de un equipo que pasa con el segundo mejor coeficiente, tras haber sido superado solamente por la Gimnástica Segoviana, con la que los chicos de Juan Carlos Pereira pugnarán por el título a partir de la segunda semana de abril.
El Tordesillas, salvado
A estos tres conjuntos se le puede sumar un cuarto, después del convenio rubricado el pasado verano por el Real Valladolid con el Atlético Tordesillas. El cuadro rojiblanco supo enderezar el rumbo y, pese a algún a nivel de resultados, logró la salvación en Tercera y el pase a una ronda intermedia en la que todavía podrá ganarse un puesto en el playoff de ascenso a la Segunda RFEF, actual Segunda División B. Como el resto, no obstante, su objetivo ya está cumplido.