LOGROÑÉS 0 - MÁLAGA 1
Yanis deja KO al Logroñés
Un gol del extremo franco-argelino supuso el 0-1 del Málaga en Las Gaunas, ante un equipo en caída libre y cada vez más cerca del descenso.
Cuando hace las cosas bien, al Logroñés le cuesta un mundo crear ocasiones y anotar. Si ya comete errores, el rival apenas necesita un disparo a puerta para llevarse los tres puntos. Justo antes del descanso, Iñaki concedió un córner prescindible y rompió el fuera de juego en el remate de Yanis, que se adelantó al marcaje de Petcoff. El árbitro anuló el tanto, pero no había lugar a dudas: el VAR avisó y 0-1. No sólo no se produjo respuesta riojana, ni en los cambios ni en el planteamiento de Sergio Rodríguez, sino que el Málaga estuvo mucho más cerca del 0-2: el VAR consideró que un disparo de Luis Muñoz en el 82’ no entró tras rechazar en el larguero, y le quitó otro al malagueño por posición antirreglamentaria.
Aparte de las evidentes dificultades del equipo blanquirrojo para dominar en ambas áreas, tiene otro problema igual de grave: cuando se pone por debajo en el marcador, casi nunca remonta. Sólo venció a un Oviedo con diez en el Tartiere y empató en el 93’ al Castellón en Las Gaunas. El resto de los partidos se han traducido en derrotas. Demasiadas piedras en una mochila que únicamente carga con ocho puntos de los últimos 48, una victoria en 16 jornadas. Técnico y futbolistas transmiten claros síntomas de ansiedad y agotamiento. Muy mala cosa cuando quedan 13 encuentros de la segunda vuelta y la renta sobre el descenso se reduce a dos exiguos puntos. El margen de maniobra disminuye dramáticamente.
Y eso que el Logroñés arrancó bien. Soriano sacó con la pierna izquierda un tiro en el 6’ de Paulino, seguramente el hombre más en forma de los locales, después de una buena acción colectiva. De las botas del cántabro salieron centros, pases y conducciones con peligro, aunque no le acompañaron Nano, Olaetxea ni Rubén. El Málaga, desdibujado en la primera mitad, sacó petróleo con el tanto de Yanis. En la segunda parte perfeccionó la presión… y sólo con eso asfixió a un grupo devorado por la tensión y su mala dinámica. Caye, Jozabed, Yanis y Muñoz generaron varias oportunidades que no terminaron en la red por muy poco. La que acabó dentro la anuló Ais Reig por fuera de juego de Muñoz, y su gol fantasma no subió. Muy buenas sensaciones para los malacitanos. El Logroñés debe reaccionar ya o su primera campaña en el fútbol profesional concluirá en tragedia.