El 'verdugo' Iago Aspas testa la defensa del Pucela
El punta del Celta ha marcado ocho goles en ocho partidos ante un Real Valladolid incapaz de dejar la portería a cero más que dos veces este curso.
Después de cumplir ciclo de amonestaciones y tras un arranque de 2021 irregular, con problemas físicos y sin goles, Iago Aspas se enfrenta mañana domingo a una de sus víctimas favoritas: el Real Valladolid. El 'príncipe de las bateas' se ha enfrentado en ocho ocasiones a los blanquivioletas y promedia un gol por partido. Aunque lleva cuatro sin ganar, no conoce la derrota, pues en los cuatro anteriores participó en triunfos vigueses.
El puntal del Celta es verdugo consumado de los vallisoletanos, como lo son otros futbolistas como Nino o como Griezmann. Su idilio personal con su próximo rival arrancó en una eliminatoria de Copa del Rey en la temporada 2011-12, en la que sus 23 goles acabarían sirviendo para devolver al conjunto celeste a Primera División de la mano de Paco Herrera. Ese ascenso se consumaría meses después tras asaltar Zorrilla, aunque el Pucela también terminaría subiendo con Djukic al mando.
En la 2012-13 fue el principal responsable de las dos victorias viguesas. Primero, hizo un doblete en Balaídos y, más tarde, sentenció a los pucelanos en la jornada 37, aquella en la que el Real Valladolid se dejó llevar y favoreció la permanencia del Celta en Primera. Tras el descenso del Pucela a Segunda, tardaría varios años en volver a convertirlo en víctima. Lo hizo en la quinta jornada de la 2018-19, en la que el postrero empate de Leo Suárez inició la buena racha visitante.
Después de cinco partidos seguidos viendo puerta, Aspas fue incapaz de hacerlo en los tres siguientes. Sin embargo, siempre vuelve, como demostró en la ida, cuando se sacó de la chistera un genial remate sin ángulo que sorprendió a Bruno y a Roberto. Después de no marcar en todo 2021, volverá a poner a prueba a la defensa vallisoletana, que solamente ha dejado la portería a cero en dos partidos en toda la temporada.
Después de sus ocho primeros enfrentamientos, promedia un gol por encuentro, siendo, junto al Huesca, el único rival ante el que lo hace habiéndolo enfrentado más de cinco veces (seis, en el caso de los oscenses). A él se encomendará Coudet, buscando un alivio a la racha reciente de un Celta que solamente ha ganado un partido y ha perdido 17 de los últimos 23 envites que no ha jugado.