El Girona ha igualado ya los 16 puntos fuera del curso pasado

En Girona no quieren pensar en otra cosa que no sea acabar la temporada en puestos de playoff. El vestuario, tras el empate contra el Mirandés (3-3), acabó con la racha de dos derrotas seguidas y, además, tras igualar un 3-1 en los últimos diez minutos de partido se ha demostrado que está vivo. Es cierto que con lo realizado hasta la fecha no les llega para estar entre los seis primeros clasificados (están a siete puntos del playoff), pero hay confianza y Francisco tiene claro que hay mucho margen de mejora. Además, hay un dato que les refuerza porque a domicilio el equipo está cumpliendo: ya han igualado los 16 puntos que firmaron la temporada pasada lejos de Montilivi.

Mientras que hace un año se sumaron 16 puntos en 21 partidos (tres victorias, siete empates y 11 derrotas), esta temporada ya se ha alcanzado esta cifra tras sólo 13 duelos. Esto permite ser optimista al bloque gerundense porque el balance hasta la fecha fuera ha sido de cuatro victorias (una más que hace una campaña), cuatro empates y cinco derrotas. Se puede considerar que son buenos números porque el Girona es el sexto mejor conjunto de Segunda a domicilio. Tan sólo le superan Mallorca (28), Almería (22), Espanyol (21), Málaga (20) y Mirandés (19).

Al Girona le faltan 17 encuentros para finalizar la Liga y mientras que ocho de ellos serán a domicilio, nueve los afrontará en Montilivi. A priori algo favorable, pero si los números fuera son considerados positivos, en casa deben mejorar. Y el motivo no es otro que han sumado 18 puntos de 36 posibles. Justo la mitad y de ahí que sea el peor equipo, junto al Mirandés, de los 12 primeros clasificados. Hacer de Montilivi un fortín para ganar fuerza en la lucha por el playoff es crucial y este domingo, ante el Castellón, tendrán una buena oportunidad para colocar la primera piedra.