Un doble campeón de la Champions en el paro
Daniel Sturridge no ha tenido la carrera que muchos esperaban. Se encuentra sin equipo y confía en poder volver a la Premier League.
El mundo del fútbol es una constante máquina de generar ídolos e iconos. Cada semana aparecen nuevas "perlas", "diamantes en bruto" y "jóvenes talentos" que captan la atención de los aficionados y de los directivos de los clubes. Pero tan fácil cómo se eleva a un altar a los jugadores, se les condena a un olvido del que es muy difícil salir.
En esa situación se encuentra Daniel Sturridge, un dos veces campeón de Champions, que a sus 31 años no tiene equipo. El natural de Birmingham fue uno de esos adolescentes por los que se pelearon los grandes clubes de la Premier. Criado futbolísticamente en la cantera del Aston Villa, fue fichado por el Coventry para acabar llegado a la academia Manchester City con 14 años.
El atacante fue quemando etapas hasta que debutó con el primer equipo de los skyblues en Premier League en febrero de 2007 en un partido ante el Reading con tan solo 18 años. En la temporada 08-09, la primera bajo influencia de la gestión de los Emiratos Árabes, el joven jugador contó con más oportunidades siendo titular tres veces en liga, marcando cuatro goles y dando dos asistencias, y tres en Europa League.
La ilusión de Stamford Bridge
El Chelsea de Abramovich se fijó en el atacante de 20 años y decidió pagar algo más de siete millones para hacerse con sus servicios. En una plantilla con Drogba, Anelka, Lampard, Joe Cole, Malouda, Deco o Kalou, no pudo contar con muchas oportunidades, jugando 13 partidos en Premier como extremo, pero destacando en la FA Cup en la que jugó cuatro partidos metiendo cuatro goles y saliendo al campo en el último minuto de la final que se llevó el Chelsea de Ancelotti.
Carletto fue un entrenador muy influyente en su formación, a pesar de compartir solo dos años, y llegó a decir que estaba muy feliz de contar con Sturridge y que lo estaba haciendo muy bien en su cesión en el Bolton, la cual se produjo en la segunda mitad de la temporada 2011. El inglés rindió muy bien y metió ocho goles en tan solo 14 partidos, lo que le valió para ganarse el puesto como extremo derecho en Stamford Bridge en un ataque formado por Drogba y Mata.
Con once goles en 30 partidos en Premier y cinco titularidades en una Champions League que acabó levantando el Chelsea, ese año fue el de su explosión y como no, le llegó la oportunidad en la Selección inglesa en noviembre de 2011 con 22 años.
El Liverpool, Suárez y la liga del resbalón
Todo hacía pensar que Inglaterra se encontraba con un atacante para toda una década, pero la siguiente temporada fue un aviso del infierno que le iba a tocar vivir. Tras no poder contar para Rafa Benítez por una lesión, el LIverpool se lanzó a por el joven pagando 15 millones para que completase una delantera prometedora con Luis Suárez.
Y tanto que lo fue, la 13-14 fue la única temporada de la década en la que los aficionados del Liverpool pasearon orgullosos antes de la llegada de Klopp. Los reds se quedaron a solo dos puntos del City en una liga que se les escapó tras el famoso resbalón de Gerrard. El uruguayo y el inglés formaron una dupla increíble que acabó con 31 y 21 goles cada uno, siendo los dos máximos anotadores de la competición.
El infierno de las lesiones
Tras el fichaje de Suárez por el Barça, Sturridge tenía que liderar el ataque red, pero empezó ahí el calvario con las lesiones. Primero el muslo y después la cadera le dejaron en el dique seco casi toda la temporada. La dichosa cadera, la rodilla y una lesión de muslo le golpearon en la siguiente campaña en la que aún así rindió a buen nivel metiendo ocho goles en catorce partidos de Premier y metiendo el gol del Liverpool en la final de Europa League que se llevó el Sevilla. Su premio fue ir a la Eurocopa donde acabó siendo titular.
Con Firmino y Mané ya en el equipo, las lesiones le dieron un pequeño respiro, haciéndole perder "solo" 10 partidos. Pero en la siguiente temporada, los continuos problemas físicos hicieron que en el invierno de 2018 se marchara cedido al West Brom donde volvió a recaer y solo pudo jugar seis partidos de liga. A su vuelta el Liverpool de Klopp ya carburaba como uno de los mejores equipos de Europa y actuó como revulsivo de una delantera que todos podríamos citar de memoria, Salah-Firmino-Mané. Levantó su segunda Champions, a pesar de jugar tan solo nueve minutos en la fase final, y terminó su contrato saliendo del equipo por la puerta de atrás, perseguido por las lesiones.
En su despedida Klopp declaró que "se había ganado el ser consideraron como uno de los grandes del Liverpool moderno" y lo definió como "uno de los mejores finalizadores que he visto en mi vida".
De Sevilla a Turquía y una sanción por apuestas
A pesar de haber estado cerca de firmar con el Sevilla un año antes, el fútbol turco -destino asiduo de viajas glorias europeas- fue el acabó acogiendo a Sturridge. Concretamente el Trabzonspor donde volvió a tener problemas de lesiones y jugó solo once partidos hasta ser sancionado por la FA Cup por su implicación en apuestas deportivas. El jugador aconsejó a su hermano apostar por su fichaje al Sevilla el cual finalmente no se produjo y la UEFA, previa apelación de la FA, castigó al futbolista con una multa de 83.743 euros y una inhabilitación de seis semanas. ¿Les suena? Un caso muy parecido al que vive ahora Kirean Trippier. El equipo le rescindió el contrato al conocer la sanción.
Pocas opciones le quedan a un jugador de 31 años cuando ni siquiera la vía turca funciona. Desde ese momento, Sturridge está sin equipo, un jugador del que todos esperaban que a esa edad estuviese dando sus últimos años en la élite europea. Pero en el fútbol y en la vida a veces no solo llega con creer y tener las condiciones. Hace falta suerte, esa que al inglés le fue esquiva, al contrario que las lesiones que le acompañaron durante toda su carrera.
En busca de una segunda juventud
Sturridge confía en volver al fútbol y hubo múltiples rumores que apuntaban a su fichaje en el mercado de invierno. Según la información del Daily Mail el jugador interesa a equipos de Championship y MLS y ha recibido grandes ofertas de Arabia Saudí y Egipto, pero las ha rechazado ya que cree que aún puede dar guerra en la élite. Hay varios equipos de Premier League que le han invitado a entrenar y él está abierto a la vía de ganarse el puesto por esa vía.
Al estar libre puede firmar en cualquier momento y a ese clavo ardiendo se agarra Sturridge en busca de una segunda juventud. A sus 31 años se resiste a caer en el pozo del olvido y sueña con volver a hacer vibrar a una afición, la de los equipos de la Premier League, que hace no tanto le elevaba a los altares.