El Lens hunde al Rennes
El conjunto de Julien Stephan tocó fondo contra un rival que le expuso las carencias durante los 90 minutos. Kalimuendo y Ganago certificaron la victoria.
Tras un inicio de temporada esperanzador y en el mejor mercado de fichajes de su historia, el Rennes sumó otra derrota inesperada y perdió con estrépito por 0-2 contra el Lens. Los goles de Kalimuendo y Ganago hundieron todavía más a un equipo que ha tocado fondo a mitad del curso.
Con Camavinga en el banquillo, en un claro toque de atención de Stephan a la joya de la corona del Rennes, el conjunto bretón volvió a mostrar unas carencias muy preocupantes para llegar a la portería rival hoy. El Lens, un equipo que deja muchos espacios a la espalda de sus carrileros siempre, decidió cederle la posesión a su rival y a replegar para salir al contragolpe a través de Kakuta y Kalimuendo. El plan no pudo tener mayor impacto, ya que los norteños se fueron al descanso venciendo 0-1.
El gol del Lens expuso aún más los problemas defensivos del Rennes, que, desde que vendiera a Raphinha al Leeds el último día de mercado, apenas ha ganado un encuentro de los últimos 11. Kakuta, el más listo de la clase, aprovechó un mal control del joven Truffert y, con una asistencia de delicada sutileza, dejó solo a Kalimuendo, que batió a Salin. Fue la culminación de una primera mitad que agudizó todavía más la crisis de juego y resultados que se vive actualmente en Rennes.
Tras el descanso, Julien Stephan intentó reaccionar dando entrada a cuatro jugadores. Doku, Camavinga, Niang y Maouassa ingresaron en el terreno de juego para darle la vuelta al marcador, aunque los problemas estructurales y de sistema del Rennes seguían estando muy patentes. Aún así, Maouassa tuvo de falta una gran ocasión para empatar el partido, pero Leca adivinó las intenciones del lateral en una falta y evitó el empate.
La crisis del Rennes es tal que, en un córner botado por los locales, el Lens aprovechó las indecisiones del rival y acabó sentenciando el encuentro. Ignatius Ganago, un delantero salido de la misma academia que Samuel Eto’o, aprovechó una gran asistencia de Seko Fofana para batir a Salin tras previamente haberse acomodado el balón a su pierna derecha con una sangre fría espeluznante. Sangre fría que no tuvo el Rennes para darle la vuelta al marcador y que provocó la derrota del cuadro bretón, anclado en un pozo del que parece que cada día tiene más complicado encontrar el fondo.