De En Nesyri y Ontiveros a Larrubia y Ramón: la cantera prestigia al Málaga
La reciente renovación de Larrubia hasta 2023 nos trae a colación los efectos beneficiosos a medio y largo plazo que tiene apostar por jugadores de la casa.
El Málaga ha ingresado más de 70 millones de euros durante la etapa de Abdullah Al Thani como propietario del Málaga. Futbolistas formados en La Academia que tuvieron que ser vendidos, no siempre al mejor precio, para solventar situaciones económicas de extremada gravedad. El declive del Málaga tras la etapa inicial de opulencia y despilfarro se empezó a detectar en toda su gravedad tras la dimisión de Juande Ramos en diciembre de 2016. El Málaga había sido eliminado de la Copa por el Córdoba y el técnico, pese a tener tres años de contrato, se marchó harto de las injerencias y caprichos de Al Thani.
Francesc Arnau, entonces director deportivo, hizo un movimiento que muy poco tiempo después fue fundamental para la supervivencia del Málaga. Renovó hasta 2020 a dos canteranos, En Nesyri y Ontiveros que apuntaban muy buenas maneras pero con escaso protagonismo en el primer equipo. Juande Ramos empezó a dar cancha a En Nesyri no porque tuviera una confianza colosal en él, sino porque Michael Santos, el delantero por el cual se habían pagado 4,5 millones de euros no le convencía nada de nada. El marroquí fue el máximo goleador de la pretemporada con seis goles. Pero en aquella temporada 2016-17 participó en 13 partidos, ninguno como titular. Javier Ontiveros, ni eso. Solo cuatro partidos. La renovación de estos dos jugadores pasó desapercibida.
Solo año y medio después En Nesyri fue traspasado al Leganés por 5,3 millones de euros y el equipo pepinero le revendió al Seilla por 20 millones de euros. ¡Tremendo! En el verano de 2019 Ontiveros fue traspasado al Villarreal por 7,5 millones de euros. Dos ventas que al Málaga le dieron 12,8 millones de euros sin los cuales el club habría tenido hoy día muy complicada la supervivencia.
Juande, Cristo, Larrubia y Ramón
La crisis del Málaga explotó en el verano de 2019. La deficiente gestión de Al Thani dejó una plantilla con solo 17 profesionales. Víctor Sánchez del Amo no tuvo más remedio que dar cancha a chavales del filial que en muchos casos le dieron un resultado formidable.
Y a pesar de las estrecheces económicas, Manolo Gaspar, el director deportivo, ha conseguido renovar a varios de estos jugadores que pueden ser el futuro del Málaga o, si vienen mal dadas, dejar dinero por un hipotético traspaso. Esta semana David Larrubia ha renovado hasta 2023. El club ya se aseguró la continuidad de Hicham hasta 2022, Ismael Casas, Cristo y Juande (2023), y por supuesto Luis Muñoz, hasta 2022.
Quedan jugadores por atar aún pero el club está en ello. El próximo objetivo es Ramón Enríquez, pero también Ale Benítez, el meta Gonzalo, Juan Cruz o Mike como informa El Desmarque Málaga. La cantera, como siempre, al rescate.