Embarba y Raúl de Tomás, una sociedad de altos vuelos

Se oficializaba el fichaje de Adrián Embarba por el Espanyol el pasado 23 de enero. Solo dos días más tarde, el 25, debutaba ante el Athletic Club y brindaba una asistencia de gol a Raúl de Tomás. Podría parecer un flechazo, pero lo del extremo y el ariete es una historia de amor que viene de largo, y que escribió un capítulo más el lunes en La Rosaleda, donde ambos se repartieron goles y pases, certificando que si siguen en este momento de forma constituyen la seguridad de medio ascenso para el club perico.

Al verano de 2017, cuando De Tomás recaló en el Rayo Vallecano cedido por el Real Madrid se remonta esta conexión, que en Segunda División ya vivió cuatro asistencias de Embarba al ‘nueve’ y una en dirección inversa. Dos más se produjeron la temporada siguiente en Primera partiendo de los pies del extremo. Y, en su reencuentro en el Espanyol, ya se han regalado el uno al otro otros tres goles: el mencionado del día del Athletic y los dos del lunes ante el Málaga. Primero fue Embarba el que sirvió a RdT para que anotara de cabeza y, unos minutos después, el ariete quien brindaba el tanto en bandeja a su compañero y amigo.

"Ya nos conocemos y nos entendemos muy bien", evidenció por si quedaba alguna duda Embarba, el mejor asistente que ha tenido De Tomás en toda su carrera profesional, en los medios del Espanyol. Diez son las dianas que se han repartido desde que juegan en el mismo equipo.

Y juntos, o por separado, entre ambos suman nueve de los 14 goles que presenta el Espanyol después de las diez primeras jornadas, los cinco de RdT (uno más que en la pasada temporada pasada desde que firmó por el club perico) y los cuatro de un desatado Embarba. "Cuando el equipo trabaja así, al final las cosas salen solas. Le puedo dar los goles o me los puede dar él pero lo importante es que el equipo gane, y eso es lo que estamos haciendo", rubrica el jugador de banda.