Así es el proyecto del Andorra de Piqué para subir a Segunda
El presidente tiene entre ceja y ceja llevar al club al fútbol profesional: "Esa es la idea y la apuesta". Han llegado fichajes ilusionantes. Gran pretemporada.
La nueva Segunda División B llega para poner contra las cuerdas todos los proyectos a largo plazo. Que se lo digan a Gerard Piqué, que tiene como objetivo llegar al fútbol profesional, pero que ve en el nuevo formato una ratonera en la que no se puede cometer ni un solo error. Desde luego, el central del Barcelona y sus hombres de confianza han trabajado para que el equipo esté en la parte alta. Para empezar, desde la función mediática, con el presidente más implicado que nunca en redes sociales e, incluso, en entrevistas. En una charla con el portal futbolcatalunya.com, confirmó que la gran meta para este año es llegar a LaLiga SmartBank: "Sí, esa es la idea y la apuesta. El grupo catalán de Segunda B es el de más nivel y esto debería representar que cada año subieran uno o incluso dos equipos, este año ha subido el Sabadell, a ver si el próximo sube también el Andorra y alguno más".
Piqué, a su vez, comentó que el nuevo formato le parece "difícil de entender de primeras" y que obliga a no fallar. Sea como fuere, a Andorra han vuelto a llegar futbolistas experimentados como Marc Pedraza, ex del Mallorca en Primera; hombres con galones como Isma Cerro; y jóvenes prometedores para dar un punto de chispa a la plantilla como el caso de Marc Aguado o Álex Pastor. Por el momento, la pretemporada invita al optimismo. Los de Nacho Castro han sumado cuatro triunfos y dos empates en ocho partidos. Todo pese a que el coronavirus se ha cruzado en su camino. Tres futbolistas han dado positivo y, afortunadamente, no han contagiado a sus compañeros. Parece que no llegan para disputar la primera jornada, que se jugará este próximo domingo en campo del Llagostera.
Difusión pública
Cuando el burofax de Messi se hizo público, en medio de una vorágine informativa cargada de pesimismo para el aficionado blaugrana y que provocó una división entre los sectores afines al capitán y aquellos defensores de la gestión de la directiva, muchos esperaban que Gerard Piqué se pronunciara. En otro tiempo, el central era habitual en redes sociales y siempre ha sido valiente a la hora de plantarse ante los medios de comunicación y dar su visión sobre la situación de los suyos. Este verano, sin embargo, se ha mantenido al margen de la actualidad blaugrana y su actividad se ha basado en respaldar al otro club de sus amores, el Andorra.
Hace ya tiempo que Piqué apostó por la gestión de un club modesto y se planteó el objetivo de que el himno de la Champions sonara en el Principado. El inicio fue impecable, con el ascenso a Tercera desde Regional y la compra de la plaza de Segunda División B. Desde entonces, el Andorra ha ido perdiendo tirón mediático tras un gran año en el que no se logró la gesta del ascenso. Nadie dijo que fuera fácil. La categoría de bronce no entiende de fama ni de presupuesto. Es bajar al barro, pelear de tú a tú y soñar con que los resultados acompañen. Y así fue durante los compases iniciales, cuando el club cabalgaba en la parte alta con Gabri en el mando de operaciones.
Acabó llegando la mala racha, lo que provocó la destitución del técnico, del círculo cercano de Piqué, y la apuesta por Nacho Castro, un hombre con experiencia en la categoría que podría dotar a la plantilla de los recursos suficientes para competir con algo más de regularidad. Precisamente esa ha sido la meta del verano. Si bien el pasado se tiró de hombres con nombre y galones como Miguel Palanca o Víctor Casadesús, este se ha buscado la fuerza de hombres experimentados, mezclado con el talento de la juventud.
Marc Pedraza, fichaje estrella
El nombre de Gerard Piqué sigue siendo un peso fuerte a la hora de cerrar contrataciones. Marc Pedraza (33) es un buen ejemplo de ello. En la 2018-19, tuvo peso en el ascenso del Mallorca a Primera División. En la élite perdió protagonismo. La pasada temporada jugó en LaLiga Santander, aunque solo participó en 131 minutos. Tampoco tuvo suerte con la temprana eliminación del equipo en Copa del Rey. Pese a ello, bajar a Segunda B supone un cambio muy drástico. A sus 33 años, ha decidido viajar al país vecino para ser un líder en el Andorra en busca del ascenso. Sin duda, un fichaje mediático e ilusionante, a espera de rendimiento.
Isma Cerro ha sido otra llegada de aúpa. A diferencia de los veteranos y los jóvenes que acostumbra a firmar el Andorra, el futbolista de 25 años está en su madurez deportiva y ha tenido experiencias recientes en LaLiga SmartBank. Además, su paso por la cantera del Real Madrid, donde disputó la Youth League y era un jugador importante, es otro aval que justifica su contratación. Llega libre y con total seguridad se hará con uno de los puestos de ataque. Es habilidoso, maneja bien ambas piernas y puede jugar por las dos bandas, de enganche o, incluso, de delantero centro.
No han sido los únicos en llegar. Álex Pastor (20), procedente de la cantera de la Sampdoria; Martí Vila (21), de la del Depor; y Pau Martínez (19), de la del Espanyol marcan la garra de la juventud. De otro filial, el del Zaragoza, firma cesión Marc Aguado, ya debutante con el primer equipo. David Ballarín (22) y Sergi Serrano (20) llegan procedentes de Ejea y Sant Andreu respectivamente. Rubén Enri (22) parte como joven más experimentado. La veteranía la pondrá David Martín, ex del Rayo Majadahonda y con casi 200 partidos en la categoría.
Todos, eso sí, llegan a coste cero. Y es que aunque el Andorra maneje un presupuesto por encima de la media (aunque lejos de los colosos de la categoría) se ha centrado en mantener el bloque que hizo un papel notable en el primer año en Segunda B con Gerard Piqué en la gestión. El equipo cerró en la novena posición de la tabla, con 41 puntos en su casillero y a ocho del Cornellá, cuarto. El descenso, por supuesto, estaba completamente salvado pese al bajón de las últimas fechas.
Un año decisivo: ¿Segunda, Segunda B Pro, descenso?
La Segunda División B se enfrenta a la temporada más compleja posiblemente de su historia. Y es que tendrá 102 equipos y no 80, habrá grupos y subgrupos y un formato que, para muchos, es complicado de entender. Hay una certeza, eso sí. Tras su conclusión, cuatro clubes regresarán al fútbol profesional, 40 darán el salto a una nueva categoría y el resto sufrirán una especie de descenso algo difícil de explicar. Todo lo que no sea subir será bajar.
La Segunda B Pro se convertirá, a partir de la 2021-22, en la tercera división del fútbol español. Por tanto, la Segunda B tradicional será la cuarta. Es decir, una menos que a día de hoy. Así pues, los proyectos ambiciosos, como el caso del Andorra, ya no pueden firmar satisfechos un año más. Tienen la obligación de dar un paso al frente y cada error será fatal. Fíjense. El Andorra comenzó en quinta jerarquía, ascendió a cuarta, pero hizo un importante esfuerzo para auparse directamente a tercera*. No ser de Segunda B Pro implicaría volver a cuarta, un ralentí a la idea de llegar al profesionalismo más pronto que tarde.
*Entiéndase como orden jerárquico dentro del fútbol español y no como nombre de las diferentes categorías.
El compromiso de Gerard Piqué
Las labores futbolísticas de Piqué, incluso sus negocios tenísticos, no le permiten ser un presidente al uso. Delega responsabilidad en sus hombres de confianza, si bien no le quita ojo a uno de sus proyectos más ambiciosos. Siempre que puede se pasa por las instalaciones o por Prada de Moles para acompañar a los suyos. Si le es imposible, mantiene el teléfono activo para preocuparse del día a día. Por supuesto, fichajes y patrocinios van acompañados de su firma. Recuerden sus palabras: "La gente que me conoce sabe que soy muy ambicioso y hoy tal vez reiréis. Pero os digo que el himno de la Champions sonará en Andorra". No era un farol.
En pretemporada ya se han visto los buenos presagios. El triunfo 0-1 ante el Sabadell, equipo de Segunda, fue un chute de energía para el futuro próximo, aunque en la repetición salió malparado (3-1). El balance total es de cuatro triunfos, dos empates y dos derrotas, un plus para afrontar el arranque a partir de este fin de semana. Más allá de lo que sucede a pie de césped, Piqué sigue patrocinando, 'presumiendo' y compartiendo todo aquello que pasa por el Principado. El pasado 31 de julio el grupo catalán Els Catarres compuso y cantó el himno del club. Su propietario lo expuso ante sus casi 20 millones de seguidores.
Días después, se oficializó el fichaje de Marc Pedraza. Piqué, orgulloso de la contratación, también quiso compartirlo a través de su cuenta de Twitter. "Con ganas de verla en el campo", añadió a la presentación de las equipaciones que hizo el propio Andorra en sus perfiles oficiales. Mientras, el club sigue creciendo en las redes. Cuando el central del Barça tomó el control apenas contaban con mil 'followers'. Ahora, con más de 16.000. Lo importante, el fútbol, se verá a partir del este 18 de octubre. En el año de la gloria, la continuidad o el abismo.
Plantilla
Porteros: Nico Ratti, Miguel Bañuz, Diego Huesca.
Defensas: Gaffoor, Adrià Vilanova, Álex Pastor, Borja Herrera, Martí Vilà, Miguel Loureiro.
Centrocampistas: Martí Riverola, Rai Marchán, Marc Pedraza, Marc Aguado, Héctor Hevel, Rubén Bover, Adrián Lledó.
Atacantes: David Ballarín, Sergi Serrano, Isma Cerro, David Martín, Pau Martínez, Iker Goujon, Rubén Enri, Carlos Martínez y Víctor Casadesús.
Rivales de subgrupo
El Andorra se ha visto encuadrado con Prat, L`Hospitalet, Badalona, Barcelona B , Nàstic, Lleida, Espanyol B, Cornellà, Llagostera y Olot en el Subgrupo A del Grupo III. A priori sus rivales son de altura. El Nàstic es uno de los candidatos al ascenso, L'Hospitalet viene de un ascenso ilusionante, el Barça B siempre es de alto potencial... Cornellà y Lleida, equipos con metas profesionales y que se han reforzado bien en verano, también darán guerra. Si bien es difícil de predecir lo que sucederá, los de Nacho Castro parten con opciones de meterse en la batalla por ascender a Segunda División.