Vinicius, suplencia inexplicable
Como ante el Betis, a pesar de la baja de Hazard, el brasileño empezó viendo el partido desde el banquillo. Luego su presencia lo cambió todo...
A pocos metros del palco de autoridades del Di Stéfano, mientras Hazard se acercaba en el descanso a saludar a Florentino en otro día para el olvido por la nueva lesión del belga, Vinicius se iba del banquillo al vestuario resignado. Su posición en el Madrid no es sencilla: por detrás del fichaje más caro de la historia de la entidad, sus mayores esperanzas de titularidad pasan por las ausencias de Eden. Cuando por ello se le abre la puerta del once, todos sus esfuerzos se centran en evitar que se le vuelva a cerrar. En una de esas, en junio ante el Valencia, Zidane cambió el esquema y movió a Hazard para poder mezclarles...
... Pero eso no ha sido ni mucho menos lo habitual cuando Eden ha estado disponible. Más aún, a Vinicius también le ha costado entrar sin él: tras el confinamiento sólo fue su sustituto en tres de seis oportunidades. Y en el Madrid no se terminan de explicar esta gestión del técnico. No gustó que el brasileño ni calentase en Mánchester, cuando el equipo necesitaba un chispazo que le agarrase a la eliminatoria, y tampoco se comprenden los detalles anteriores durante el verano. A ellos hay que añadirles ahora sus suplencias contra el Betis, frente al que tampoco fue incluido en las sustituciones, y el Valladolid. La pizarra del francés choca en ese punto con el plan de la dirección deportiva, que proyecta de salida las bandas para Hazard y Asensio y, sin ellos por motivos médicos, de rotación y hasta de rendimiento, para Vinicius y un Rodrygo titular en la primera jornada y luego borrado del mapa.
Vinicius, único atacante del Madrid con gol en este inicio
Este miércoles Vini tuvo que esperar su turno 57 minutos. Muy pocos después, en el 65', ya se había hecho notar con un gol que valdría la victoria. El tanto tuvo algo de reivindicación en un futbolista que admira a un Zidane visiblemente incómodo con su caso. En la previa, preguntado por la falta de continuidad de él y de Rodrygo, se molestó. Repreguntado por si entendía que se pida un ascenso en el protagonismo del ex de Flamengo, también: "Todos los jugadores quieren jugar más y Vini está aquí para intentar jugar todos los partidos. Estoy contento con él, lo que tiene que hacer es centrarse y ya está".
De momento, Vinicius (122 minutos) es el único atacante de la plantilla que ha marcado, con Valverde y Ramos como los otros goleadores (la diana restante corresponde a Emerson, en propia puerta). Con su verticalidad natural, característica casi en extinción en este Madrid, el carioca ha evidenciado además cierta madurez en la toma de decisiones. Sin embargo, todavía le queda camino por recorrer, como dejó claro cuando chafó una espectacular galopada en la última jugada del partido con una picadita muy defectuosa. El domingo, frente al Levante, de nuevo con Hazard en la enfermería (tiene difícil llegar al Clásico del 24 o el 25 de octubre) e impulsado por su decisivo gol al Valladolid, podría tener otra oportunidad para perfeccionarse. Pero eso depende de Zidane, siempre inescrutable.