El Real Valladolid se impone a un Granada con menos rodaje

El Real Valladolid consiguió su primera victoria de la pretemporada después de doblegar al Granada con contundencia, por 0-3 en un partido que resolvió con claridad en la segunda parte, después de una primera en la que el mejor tono físico de los pucelanos se notó menos, por lo menos inicialmente, puesto que los andaluces comenzaron mostrando una mejor versión.

El Granada pareció más fresco de piernas en el arranque, quizás por aquello de haber comenzado más tarde su estadía en Marbella, donde ha compartido estancia con el Real Valladolid solamente desde ayer. Fue de más a menos el conjunto de Diego Martínez, todo lo contrario que el de Sergio González, que después de ver como Luis Milla (jugador que sonó en Pucela) empezaba dominando el balón, se fue asentando y teniendo más balón, sobre todo a partir de la media hora.

El mando del cuero fue más bien alterno en ese primer periodo, con ligera superioridad por parte de los nazaríes, que buscaban al siempre activo Antoñín, que debutaba. No obstante, los blanquivioletas fueron muy reconocibles; podían disponer menos de la posesión, que daba igual, defensivamente mostraban la solidez suficiente como para no conceder oportunidades claras. Así, todos los tímidos acercamientos se veían desbaratados por la línea de zagueros, en la que Miguel Rubio dejó buenas sensaciones. El central del filial vallisoletano tuvo la ocasión más clara, en un testarazo en una pelota parada.

En la segunda parte, el Granada optó por dar continuidad a su once inicial (solo hizo cuatro cambios), muy reconocible con respecto a cualquiera liguero, a pesar de la falta de fichajes o de jugadores en cuyo retorno se trabaja, como Yangel Herrera. Por su parte, el Pucela cambió a todos los jugadores de campo, y esas piernas frescas se notaron desde bien pronto, puesto que los blanquivioletas dieron un paso adelante y crecieron en campo rival.

En el minuto 53, un envío en largo de Alcaraz sobre la carrera de Sekou propició una salida en falso de Rui Silva, de la que ni el portugués ni su defensa se pudieron recuperar. El balón le quedó franco a 'la pantera', que disparó a portería sin demasiada oposición y puso el 0-1, en lo que supuso el primer gol de la pretemporada. Con ese tanto, el Real Valladolid se empezó a soltar, sobre todo por medio de un Toni Villa hambriento, ágil, mágico y rotundo jugando como mediapunta, posición normalmente ajena al esquema de su equipo.

Suyo fue el 0-2 en una acción marca de la casa, en la que lanzó un eslalon antes de ajustar bien a la derecha de Rui Silva. Si el Granada había decaído y caído en el dominio del Pucela, ese tanto no hizo más que certificarlo. Diego González fue dando entrada a la segunda unidad, entre ellos, varios futbolistas de la cantera nazarí, y el once blanquivioleta, más asentado y con más poso, anotó el tercero en una contra lanzada por Anuar que de nuevo finalizó Toni.

Antes de que esto sucediera en el 74', en el minuto 67 Puertas se encontró con el palo en la única oportunidad de que dispuso su equipo en el segundo tiempo, merced a una imperfección de Luismi en la salida de balón. En los diez minutos finales, el Pucela pudo ampliar distancias con otra rápida acción que acabó con disparo de Toni Villa, mientras que a Alcaraz (que jugó de central) le anularon un gol tras un saque de esquina.

La actividad que mostró Miguel en los minutos que jugó no le sirvió para poner la puntilla en los minutos finales, en los que, con todo de cara, el Real Valladolid mostró descaro con balón y ansioso en busca de hacer algún otro gol. El triunfo fue ya de por sí contundente con ese 0-3, que dio cuenta de un punto de forma más prematuro del Granada (no en vano, era su primer amistoso) en comparación con los blanquivioletas, que cerraron con triunfo su estadía en Marbella después de caer en el primer amigable el pasado domingo ante el Málaga.