Sevilla e Inter 'homenajean' la aventura europea de Banega
Más de 13 años después de llegar de Boca, el mediocentro argentino se despide con una final entre los dos últimos clubes de su carrera al otro lado del charco.
No lo podrían haber preparado mejor: Éver Banega se marchará del fútbol europeo homenajeado por el Sevilla y el Inter, los dos últimos equipos de una aventura al otro lado del charco que comenzó para él hace casi 13 años, en enero de 2008, cuando llegó al Valencia procedente de Boca Juniors, cambio de 18 millones de euros. No había cumplido Éver todavía los 20.
Meses después el equipo che le cedía al Atlético de Madrid para que disputara allí la 2008-2009. No se quedó en el Calderón y en Mestalla nunca tuvo la confianza de los entrenadores. Luego de otra cesión de seis meses en Newell's, en su rosario natal, en verano de 2014 Monchi vio una ganga en su fichaje y por 2,5 millones se lo llevó al Sevilla, en donde le esperaba Unai Emery, que ya le tuvo como valencianista. El técnico vasco confió en él desde el principio y Banega comenzó a dar en Nervión los mejores años de su carrera deportiva. Ganó dos Europa Leagues (la tercera en tres años para el Sevilla) pero su contrato expiraba en 2016 y se marchó precisamente al Inter.
En Milán no fue feliz. No se amoldó a la ciudad, ni a la manera de jugar del fútbol italiano, ni al equipo... Y tras una temporada, en el Sánchez Pizjuán vieron la posibilidad de rescatarle a cambio de 7 millones. Los valía. En tres temporadas más ha seguido gobernando el centro del campo nervionense y quiere poner broche de oro a su carrera sevillista con un título más, el viernes, en Colonia. Luego se marchará al Al Shabab de Arabia Saudí.