Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

INGLATERRA

Jesús García Pitarch no seguirá en el salvado Aston Villa

El equipo gastó 159 millones de euros en refuerzos y salvaron la categoría milagrósamente en la última jornada. Club y técnico renuncian a la temporada opcional que firmaron.

SUSO GARCIA PITARCH.
Alberto IranzoDIARIO AS

La etapa de Jesús García Pitarch (La Pobla de Vallbona, Valencia, 1963) como director deportivo del Aston Villa ha llegado a su fin, según publica en Daily Mail. El español llegó en octubre de 2018 a Villa Park cuando el equipo se encontraba en la parte baja de la Championship inglesa y, tras su llegada, los villanos lograron remontar y volver a la Premier League. Sin embargo, no fueron un recién ascendido al uso y el gasto en fichajes ascendió hasta los 159 millones de euros, en un intento por consolidarse rápidamente como un proyecto de primera categoría. No obstante, no ha sido hasta la última jornada, con un empate ante el West Ham en Londres (1-1), cuando han certificado la permanencia. 

El medio británico apunta a la diferencia de criterio entre el ya exdirector deportivo y Dean Smith, entrenador del equipo, a la hora de fichar. Mientras el segundo estaba interesado en Kalvin Philips (Leeds) y en Said Benrahma y Neal Maupay, del Brentford, Pitarch trajo otros nombres: Trezeguet, Wesley, Mwana Samatta, Bjorn Engels, Frederic Guilabert y Marvellous Nakamba. Todos ellos por un valor superior a los 65 millones en total. Especialmente sangrante ha sido el caso de Samatta, quien sólo ha logrado un tanto en 14 partidos tras haber costado casi 10 millones. 

En un intento por evitar el gasto excesivo, siempre según el medio británico, en la que será la segunda temporada consecutiva del club entre los grandes, Christian Purlslow, CEO del conjunto villano, se encuentra inmerso en la contratación de un recambio de garantías de un García Pitarch cuya etapa comenzó cuesta abajo, pero se convirtió un repecho imposible de superar tras dejar atrás la Championship.

García Pitarch y el club firmaron un acuerdo por dos años en el que se contemplaba una temporada más opcional (la próxima) si el equipo lograba la salvación. Sin embargo y a pesar de haber conseguido el objetivo, según la versión del técnico, ambas partes, de mutuo acuerdo, han decidido no ejerecer esa cláusula.