NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

CARTAGENA

Gran parte de la plantilla del Cartagena, con contrato

A excepción de los cinco cedidos y de Caballero, el resto tiene firmada su continuidad en el retorno de la entidad a Segunda.

Actualizado a
19/07/20  PLAY OFF PROMOCION DE ASCENSO A SEGUNDA DIVISION  PROTOCOLO CORONAVIRUS  COVID-19   CARTAGENA  -  ATLETICO BALEARES   MINUTO DE SILENCIO
MARIANO POZODIARIO AS

Una vez logrado el ascenso a Segunda División, el FC Cartagena iniciará el trabajo para conformar un proyecto estable en la categoría de plata. Francisco Belmonte, presidente y miembro de la comisión deportiva, sabe que la próxima temporada el conjunto albinegro no contará con el potencial económico de otras entidades y que por ello se dejará de ser un referente. En palabras del mandatario, "habrá que adaptarse a la nueva situación".

Uno de las primeras decisiones que tendrán que tomar los gestores albinegros será con qué jugadores de la actual campaña deciden continuar. Y es que salvo los cinco cedidos (Johannesson, Álex Martín, William, De Vega y Jovanovic) y el delantero Pablo Caballero, el resto tiene contrato en vigor (unos con renovación automática y otros porque se comprometieron por varias campañas). En total, 17 futbolistas con la continuidad firmada pero que no les asegura que formen parte del plantel del FC Cartagena en el ejercicio 2020-21.

De los cinco cedidos, el club confía en poder retener un año más a William y De Vega. Ambos han sido piezas importantes durante el campeonato tanto para Munúa como para Borja Jiménez, ganando la partida en el once titular a compañeros como Elady o Araujo, a priori indiscutibles. En el caso de los que tienen contrato, no podría descartarse que llegase una oferta importante por Carrasquilla. El panameño, que llegó el pasado verano cedido por el Tauro FC, ha sido una de las sensaciones de Segunda B y llamó la atención de clubes de México, Inglaterra y de nuestro fútbol, pero el FC Cartagena se adelantó a todos y en diciembre pagó 300.000 euros por hacerse con sus derechos de forma definitiva.