Un Málaga compacto frustra otro asalto del Rayo al playoff
Los franjirrojos fueron incapaces de desactivar a la defensa menos goleada y desperdiciaron de nuevo la ocasión de meterse en playoff. Los andaluces se alejan un pasito más del peligro.
EI tren del playoff se ha vuelto a escapar justo en las narices del Rayo, todo un experto en estas lides, por algo éste es el cuarto consecutivo que se le marcha. El punto (otro, y ya van veinte empates, nadie destrona al 'rey') ha sido insuficiente para montarse y sigue poblando un andén en el que diez equipos esperan al próximo.
Pronto se subió el Rayo al partido, con un testarazo de Catena desbaratado por Juankar bajo palos. Tenía las ideas y la iniciativa, de ahí que probaran Isi, Trejo... sin demasiado tino. Se mascó el 1-0 cuando Qasmi (en fuera de juego) chocó con el palo y Munir despejó un trallazo de De Frutos. Todo esto en el primer cuarto de hora. Un guión de sobra conocido para los madrileños. Eso de perdonar ha sido peligrosamente repetitivo.
El Málaga trataba de asomar la cabeza por el área rival, a través de Diego González, Tete Morente y Lombán. Los andaluces, comandados por un Cifu bastante activo, iban mejorando y creciendo a partir de su seguridad defensiva. Por algo tiene la zaga menos goleada de Segunda, que se sometió a una evaluación continua con las llegadas de Isi y De Frutos.
La segunda mitad empezó fuerte. Lombán puso un balón, de área a área, teledirigido a Cifuentes, que se adelantó a Dimitrievski en una mala salida, pero su cabezazo no cogió puerta. Cuanto más se crecía el Málaga, más desdibujado parecía el Rayo. Le costaba sacudirse de la presión de los de Pellicer y se encomendaba a los chispazos de De Frutos.
Los visitantes tenían el duelo y al rival donde querían. Buenacasa probó a Dimi y éste salvó los muebles. Ya con la recta final asomando, Paco reformó todo su flanco izquierdo para gozar de más protagonismo. El Rayo tomó la palabra. Mario y Saveljich volvieron a perdonar cuando se encontraban a apenas un metro de la portería.
No se resignaban los locales al enésimo empate y a repetir otra vez la misma historia, aunque les resultaba misión imposible desmantelar el entramado defensivo de los andaluces. A cinco estaciones para el final del trayecto, el Rayo continúa sin dar el paso definitivo hacia el playoff, mientras que el Málaga consigue meterle un kilómetro más al abismo.