El sueño del Benfica es Nagelsmann
Es la primera opción del presidente del club lisboeta, Luis Filipe Vieira, para ocupar el banquillo de Las Águilas el próximo curso.
Julian Nagelsmann se ha convertido en uno de los técnicos alemanes más cotizados del mercado. Su labor al frente del Hoffenheim y su primera temporada al mando de un Leipzig que cerró el curso en puesto de Champions colocan al joven entrenador de 32 años en el foco de todo tipo de clubes en el panorama europeo. Tal y como pudo saber AS, el último en expresar su admiración por Nagelsmann es el Benfica, que haría lo que fuera necesario para convencer al míster teutón.
Su principal valedor es el presidente del cuadro portugués. Luís Filipe Vieira lleva tiempo siguiendo la trayectoria de un Nagelsmann que, en su día, llegó a sonar incluso para el banquillo del Santiago Bernabéu. Su capacidad táctica, su talento para exprimir a cada jugador y su corta edad imponen a Vieira, al que le gustaría encabezar el próximo proyecto en el Benfica (su entrenador Bruno Lage dimitió hace unos días) con Nagelsmann a la cabeza.
Las Águilas pasan por un momento complicado. Después de liderar la Liga NOS durante un total de 14 jornadas cayeron eliminados en los dieciseisavos de la Europa League frente al Shakhtar de manera traumática y terminaron desplomándose en la competición liguera también. Una victoria en los últimos siete partidos han provocado que el Oporto haya ampliado el liderato a un total de seis puntos a falta de cinco jornadas para el final y que la cúpula lisboeta se replantee el futuro.
Suenan con fuerza Mauricio Pochettino, ex del Tottenham, al que parece convencer el proyecto del Benfica, según fuentes cercanas al preparador argentino. Pochettino busca un proyecto nuevo y en la capital portuguesa cuentan con que termine dando el sí al Benfica. Unai Emery sería el sustituto, pero el que más convence a Vieira sigue siendo Nagelsmann. Tiraría la casa benfiquista por la ventana por él alemán, aunque sabe que su contratación se antoja prácticamente imposible. Tiene contrato en Leipzig hasta 2023 y, por desgracia para Vieira, un proyecto igual de apasionante que el del Benfica.