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REAL MADRID

En el Madrid no dan crédito: se critica el acierto del VAR

En el club se han visto y repasado las famosas tres jugadas de Anoeta y cada vez tienen más claro que las quejas desde Barcelona carecen de fundamento.

El líder disfruta de sus primeras horas en la cumbre del Campeonato tras su trabajado triunfo en San Sebastián entre la satisfacción por el deber cumplido y la estupefacción por las críticas vertidas al otro lado del puente aéreo en torno a la actuación arbitral (incluida las dudas de Setién sobre la utilización del VAR). La frase es directa y diáfana: “Es alucinante que se critique y se ponga en solfa los tres aciertos del árbitro y del VAR. Por primera vez se castiga haber aplicado el Reglamento correctamente”. En el club se han visto y repasado decenas de veces las famosas tres jugadas de Anoeta y cada vez tienen más claro que las quejas desde Barcelona carecen por completo de sentido.

“En el penalti a Vinicius se ve claramente que Llorente le toca cuando va a chutar a gol. Penalti claro”. Iturralde sostuvo el mismo criterio en El Larguero. En lo que se refiere a la jugada del gol anulado a Januzaj, en las oficinas de Valdebebas recuerdan con buen criterio que la temporada pasada le anularon a Modric un gol casi idéntico en el Bernabéu ante el Celta. Modric tiró desde fuera del área, Varane estaba en la línea de tiro en fuera de juego y no tocó la pelota. Pero Martínez Munuera, justo el mismo árbitro que estaba ayer en el VAR, lo anuló por considerar que dificultaba el francés al visión del portero Rubén Blanco. “Pero claro, si se lo anulan al Madrid no pasa nada porque eso no genera polémica sino regocijo”. Aún así hay una toma aérea desde detrás de la portería madridista (la que se incluye en esta información), en la que se aprecia perfectamente que Merino está en línea con la visión diagonal de Courtois cuando dispara Januzaj. Eso es lo que sanciona el VAR. Interferencia de un rival que está en posición de fuera de juego. Y Merino lo está…

Y en la tercera acción, la del gol de Benzema, hay varias tomas en que se ve que Karim control la pelota con el hombro. “Si lo llega a anular hubiese sido para compensar, pero el árbitro y el VAR demostraron que el Reglamento está para aplicarlo”, concluyen. Además, añado yo, el VAR no ordenó revisar en la primera parte un penalti sobre Marcelo cuando iba a rematar a gol. En el vestuario de Anoeta el brasileño sí se quejó de que esa acción no fuese al menos revisada.

Además, habrá que recordarle al Barcelona que no se quejó del VAR cuando en el Clásico de diciembre en el Camp Nou se dejaron de señalar dos penaltis clarísimos sobre Varane (uno de Lenglet y otro de Rakitic) o que ese mismo día se anulase un gol a Bale por un fuera de juego milimétrico de Mendy, que no quedó claro en la imagen que dio la producción de televisión. O cuando el Barça ganó a la Real Sociedad en el Camp Nou gracias a un penalti postrero señalado por una presunta mano punible de Le Normand. O la expulsión de Germán Sánchez, totalmente desproporcionada y exagerada, que permitió al Barça desatascar su duelo con el Granada que iba camino del 0-0 final en el estreno de Setién. O el gol ilegal de Lenglet, apoyándose en el salto con las dos manos sobre el defensa del Betis (Bartra), que permitió a los de Setién ganar en el Villamarín. O el penalti sufrido por Vinicius en Villarreal no pitado (los blancos solo empataron). O el penalti claro por agarrón a Brahim en Mallorca que se quedó sin castigo (el Madrid perdió con los baleares). O la mano de Feddal en el Bernabéu dentro del área, sin castigo, que hubiera roto el empate con el Betis. O las dos manos del Levante en su área, en Orriols, cuando el Madrid acabó perdiendo el partido el día que se lesionó Hazard. Aquí hay café para todos, pero parece que Piqué sólo se acuerda de ello cuando el Barça se deja dos puntos en el Pizjuán. De eso no tiene la culpa el VAR ni el Madrid. Quizás sea el precio que hay que pagar por ser líderes y haber recuperado la condición de favoritos para ganar esta Liga disputadísima y salpicada por el vapor de las polémicas arbitrales.