El Real Valladolid llega a Leganés con la artillería preparada
Sergio González duda sobre el acompañante de Joaquín en el centro del campo, mientras que Ben Arfa y Sandro, listos, esperarán en el banquillo su oportunidad.
El Real Valladolid viajó a Leganés con la intención de reentrar en la competición con una victoria que le catapulte en la clasificación y le aleje de la zona de peligro. Ganar es la intención, perder no es una opción porque colocaría en una posición fea a los de Sergio González ante un rival directo. Para este encuentro el técnico cuenta con todos sus futbolistas menos el portero suplente, Caro, que se lesionó al final de esta semana en el codo. Le suplirá el portero del Promesas, Samu Pérez.
En cuanto al once, a la espera de ver cómo llegan los jugadores tras tres meses sin competir, no se esperan muchos cambios respecto al equipo habitual con un típito 4-4-2, pero donde no se descartan sorpresas. Masip seguirá siendo el portero mientras que la defensa estará formada por Moyano, Olivas, Salisu, de quien dice que se dice en Francia que se va al Rennes, y Nacho; en el centro del campo es seguro Joaquín en su papel de barredor y puede ser acompañado de San Emeterio, si quiere mantener la posición, de Alcaraz, para equilibrar o de Míchel si quiere más juego, con el fin de dejar las bandas para Hervías y Plano, y la idea de que arriba repitan Guardiola y Unal.
Comenzarán en el banquillo Ben Arfa y Sandro, dos jugadores llamados a brillar en estos 11 duelos, pero que en Butarque tendrán que esperar en el banquillo una oportunidad para lucir. Y es que tanto el francotunecino, como el canario pueden estar jugándose el contrato de la temporada que viene. El primero será libre al acabar la competición y ya tiene pretendientes y el segundo será vendido por el Everton y necesita lucir y ponerse en el escaparate.