Oviedo y Ponfe, pulso en silencio
El Oviedo recibe a un Ponferradina del que solo le separan cuatro puntos. Sin embargo, la distancia en cuanto a estados de ánimos es bastante más amplia.
Solo 4 puntos separan a Ponfe y Oviedo, aunque las sensaciones son muy diferentes: de campaña notable de los bercianos y de crisis continúa en los azules. El Tartiere reúne esta noche a los dos equipos para ver quién empieza con buen pie el nuevo fútbol, el que se juega en silencio (sigue el partido en directo en As.com).
Al Oviedo le queda la sensación de que el parón le ha cogido en el peor momento, justo cuando encadenaba dos victorias y empezaba a levantar el vuelo, fuera ya de la zona de play-off. Ziganda ha insistido durante el confinamiento en que no quiere cambiar muchas cosas, que pretende reforzar lo que hace bien el equipo antes de introducir cambios en el estilo. El 4-4-2 seguirá siendo el esqueleto sobre el que se asienta.
Incluso el once será el mismo. El navarro parece dispuesto a repetir el equipo que se impuso en Almendralejo (1-2) en la última jornada, la victoria más revitalizante del curso. Ziganda tiene la duda de Berjón hasta última hora, aunque parece improbable que llegue a tiempo tras entrenarse con molestias la última semana.
La Deportiva vuelve a la competición condicionada no sólo por el parón que afectó a todos los equipos, sino también por las ausencias de dos jugadores importantes para los de Bolo: Ríos Reina e Ivi. Aunque el club no ha emitido ningún tipo de parte médico amparado en el control de la comunicación por parte de LaLiga, ambos futbolistas han estado apartados del grupo en las últimas sesiones de trabajo y todo apunta a que el técnico tendrá que recomponer la banda izquierda con Luis Valcarce y Nacho Gil o Javi Navarro.
En el resto de la alineación inicial no se esperan grandes sorpresas, salvo la duda de si Bolo optará por jugar con Kaxe y Yuri en punta o sacrificará a uno de los dos para reforzar el centro del campo.
El otro gran reto de los bercianos es aprovechar los partidos a puerta cerrada para darle la vuelta a sus malos números a domicilio, que convierten a la Deportiva en el peor visitante de Segunda.
Los blanquiazules quieren retomar la competición manteniendo las señas de identidad que les han mantenido toda la temporada en la zona tranquila de la clasificación y sumar tres puntos en Oviedo que les acerquen un poco más al objetivo final de la permanencia.