El Girona ha vuelto a jugar en Montilivi 92 días después
Pep Lluís Martí ha organizado este domingo un encuentro amistoso para dar un paso más en la preparación del ‘debut’ de Liga ante Las Palmas.
El Girona ha vuelto a jugar en Montilivi 92 días después. Pep Lluís Martí ha organizado este domingo un partido de entrenamiento en el feudo rojiblanco para intentar dar un paso más en la preparación del ‘debut’ liguero ante Las Palmas del próximo sábado. El técnico ha distribuido a su plantilla en dos equipos y se han enfrentado en un duelo. La idea era hacer un ensayo general y las sensaciones desprendidas por los jugadores han sido muy buenas.
El objetivo de este encuentro de entrenamiento era que los jugadores empezaran a competir de una manera más real y así poner en práctica situaciones de partido. Además, al disputarse a puerta cerrada han empezado a tomar conciencia de lo que se van a encontrar en las últimas 11 jornadas de Liga que restan. Los jugadores gerundenses no pisaban el césped de Montilivi desde el pasado 7 de marzo, en el duelo ante el Albacete (1-1). Ahora tres meses después han podido revivir sensaciones y Martí quiere que su plantilla se coloque ya el chip competitivo. Del duelo se han obtenido conclusiones positivas y, sin duda, una de ellas ha sido ver a Valery Fernández, que se lesionó de gravedad en la pretemporada veraniega y no ha podido debutar este curso, a un buen ritmo y listo para ser importante en este último tramo.
El Girona visitará el próximo sábado a Las Palmas en Gran Canaria (19:30) y no hay otra cosa en la cabeza de la plantilla rojiblanca que empezar de la mejor manera posible. Para alcanzar el objetivo del ascenso directo, el equipo de Martí deberá recortar, en las 11 jornadas que restan, ocho puntos. Esta es la distancia a la que vislumbran actualmente al segundo clasificado, el Zaragoza. Johan Mojica ya dejó claro el pasado sábado en una entrevista para EFE que “este tramo final es como un Mundial y queremos ganarlo”. Esa es la mentalidad que impera en Girona.