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DEPORTIVO

El Deportivo no responde a Otero y crece la incertidumbre

El consejero asegura que la deuda es menor de lo que se dice y que no es necesario vender el club a Abanca. Ha pasado casi una semana desde sus denuncias.

Miguel Otero, durante la Junta Extraordinaria de accionistas de 2018.
Jesús Sancho (Sanchofoto)

La crisis interna del Deportivo empieza a generar incertidumbre en una parte de la afición, sorprendida porque las graves acusaciones lanzadas por el consejero Miguel Otero no reciban respuesta ni explicación. Desde la Plaza de Pontevedra lo único que ha salido hasta el momento es el silencio, tanto respecto a la carta abierta que publicó Otero el pasado jueves 21 de mayo como sus declaraciones a la Agencia EFE realizadas este lunes. Desde la entidad blanquiazul se buscó en un primer momento que Otero, al estar en desacuerdo con el resto del consejo, dimitiese. El excandidato a presidente lo meditó, pero finalmente ha decidido continuar en el cargo “por honestidad y responsabilidad con el Deportivo y toda su masa social. Sin duda valoras el gran coste que tendrá contarlo, tanto a nivel personal como profesional, pero, para mí, el poder ir toda mi vida con la cabeza alta al Depor no tiene precio”.

En su primer comunicado el consejero cargaba contra el club y la venta a Abanca con duras frases: “¿No será mejor vender otro activo que el propio club? A ver si va a resultar que el Deportivo no está tan escarallado y nos lo quitan de los fuciños”. Lejos de rectificar, Otero volvió a la carga este lunes con una entrevista a EFE: “La deuda es mucho menor de lo que nos habían contado. El 17 de abril informo al Consejo de las irregularidades detectadas en la contabilidad y me sorprendió mucho que las dos personas responsables de ello hasta la fecha causaran baja voluntaria una semana más tarde y en pleno confinamiento. No creo demasiado en las casualidades. Me extrañaría mucho que si los auditores tuviesen acceso pleno a toda la contabilidad de los últimos diez años hubiesen dado la opinión que han dado”.

Momento delicado

Las acusaciones del consejero Miguel Otero se producen justo cuando el club presidido por Fernando Vidal está reactivando la Junta de accionistas suspendida por el Covid-19. Esta Asamblea es transcendental, ya que supondrá una importante reducción de la deuda a la par que convertirá a Abanca en propietaria del club. En la Junta está previsto aprobar un crédito participativo ya suscrito con la entidad bancaria (5 millones) y el cambio con Abanca de acciones por deuda (30 millones). A ello se añade una segunda ampliación de capital para accionistas de 35 millones.

La intención del club de convocar la Junta no ha variado ni un milímetro a pesar de la crisis interna. La discusión en la Plaza de Pontevedra sólo se centra en la fecha de la Junta, que debe comunicarse un mes antes de su celebración. Una corriente apunta a hacerlo esta misma semana, lo garantizaría incluir la ampliación de capital en este ejercicio ya que tendría lugar antes del 30 de junio. Otra, más conservadora por el ritmo de la desescalada, apunta a retrasarla hasta el 12 julio con las elecciones gallegas como ‘aval’ de que se podrá celebrar. La seguridad de que la Junta se realizará en breve es total y ahí se enmarca también el ascenso de David Villasuso, extrabajador de Abanca fichado por el Deportivo, que pasará a ser director general y número dos del club en breve.