Simeone y 'El club de los 3'
El técnico argentino pasó en 2014 a formar parte de esa selecta sociedad, la de los rojiblancos que ganaron LaLiga como entrenador y jugador.
El 17 de mayo de 2014, Simeone cerró un círculo que había comenzado a trazar 18 años antes, el 25 de mayo de 1996. El técnico argentino era un nuevo miembro de una sociedad que, hasta él en el Atlético, sólo tenía dos miembros: Luis Aragonés y Marcel Domingo. Con él ya tres. Un exquisito club en la historia. El de los tres. Aquellos que ganaron LaLiga en el Atlético como entrenadores y jugadores.
Marcel Domingo
Fue el primero, quien inauguró la sociedad en 1950. Francés (Salin-de-Giraud, Bocas del Ródano, 1924), portero, había llegado al Atlético en 1948 y dos años después se proclamaba campeón de Liga con el equipo rojiblanco. Lo haría por dos temporadas, además, esa 1949-50 y la 1950-51. Cuando volvió el viejo Metropolitano ya no existía, ahora lo hacía el Manzanares. En 1958, colgó los guantes y rápido se pasó a los banquillos. Era 1969 cuando llegó al Atlético de largo, como entrenador. Estaría tres años pero la gloria la tocaría en el primero: el equipo rojiblanco se proclamaría campeón de Liga en Sabadell. Este 2020 se han cumplido el 50 aniversario. Para siempre quedó su histórico contrataque.
Luis Aragonés
Fue el segundo miembro del club. Una leyenda como jugador y entrenador, no en vano la calle que lleva al nuevo Metropolitano no podía tener otro nombre que el suyo: Luis Aragonés. Jugaba en esa Liga que el Atlético ganó con Marcel Domingo en 1969, sería una de las tres que conquistaría como futbolista rojiblanco. Antes había ganado la de 1966 y después la de 1973, la primera del Atlético sobre el césped del nuevo estadio, el Vicente Calderón (la del 69 se ganó en Sabadell). La 1974-75 la comienza como jugador y tras seis partidos de Liga el 'usted' llega a su boca: se pasa al banquillo para ocupar en éste el lugar del Toto Lorenzo. En 1977 cerraba el círculo: el Atlético ganaba LaLiga, él al timón del banquillo.
Simeone
Era 1992 cuando Simeone llegaba a España, Sevilla. Dos años después fichaba por el Atlético. La leyenda comenzaba. Hace 19 años que un grito se grabó en la grada del Calderón para siempre: 'ole, ole, ole, Cholo Simeone'. Hablaba de su intensidad, de un jugador que nunca daba nada por perdido, por fiereza en el centro del campo, grito de guerra en el doblete, cuando el Atlético se proclamaba campeón de Copa y Liga, la última tal día como hoy, un 25 de mayo de 1996. Era diciembre de 2011 cuando el argentino regresaba como entrenador, después de que el club rojiblanco tratara de sobreponerse a sus años más duros, el descenso a Segunda, los años grises tratando de construir sobre aquello. Era 2013 cuando, por primera vez, se vestía de traje negro antes de un partido, la Copa en el Bernabéu, ante el Madrid. Ganaría el Atleti, gol de Miranda. El traje negro se convertiría en cábala. Cuando Simeone se sienta en el banquillo siempre lo lleva. También lo hacía ese día. El 17 de mayo de 2014, cuando su plantilla le manteaba mientras él tocaba el cielo en el Camp Nou y El club de los 2 pasaba a ser de los 3. El cabezazo de Godín le había abierto esa puerta. El Atlético acababa de proclamarse campeón de Liga.