Así vive un jugador del Hércules durante el confinamiento

Suena el despertador a la hora de siempre. Toca levantarse e iniciar la rutina, que es lo que aconsejan los especialistas durante este confinamiento. La vida para la plantilla del Hércules, como para el resto de las personas, ha cambiado por completo. Los jugadores blanquiazules están encerrados en sus domicilios. Las horas, como para todos, pasan muy lentas. Desde el pasado viernes, no se entrenan en grupo. "Está siendo muy duro, pero está toda España igual", desvela a AS uno de los pesos pesados del vestuario.

El Rico Pérez está cerrado a cal y canto y los entrenamientos se han trasladado a los domicilios. Los jugadores reciben las pautas a seguir por parte de Portu, el preparador físico del equipo. El especialista recomienda algo de cardio y ejercicios en estático, con gomas y muchos estiramientos. Pero la primera dificultad importante aparece cuando hay que romper a sudar. Está prohibido salir a la calle y muchos jugadores no tienen los medios necesarios para trabajar esa parte del ejercicio en casa. "Esta mañana he salido a correr y la Policía Nacional me ha parado y casi me multa. Me he vuelto a casa", asegura un futbolista del Hércules. Ya en el domicilio, el ejercicio es más limitado, pero "se hace lo que se puede". "Cada dos o tres días vamos a recibir nuevas pautas que se irán adaptando a lo que podamos hacer", afirma el jugador.

El balón ha desaparecido por completo. La cabeza da mil vueltas. Sobre todo predominan los pensamientos relacionados con la competición. "¿Se podrá volver a jugar esta temporada?" Se pregunta una plantilla que está en puestos de descenso y afrontaba las diez últimas jornadas con la esperanza de escapar del descenso. Todo son dudas, pero se busca como antídoto no perder la forma por si el campeonato se reanuda "cuanto antes".

Otro aspecto que está controlando mucho la plantilla es la alimentación. "Ahora toca comer menos porque el desgaste físico es menor. No podemos dejarnos llevar. Hay que seguir alimentándose bien", afirma el jugador. La familia, la televisión y las conversaciones con los amigos, vía teléfono, forman parte del día a día de una plantilla que cuenta las horas "para volver al césped".