El Madrid comunica a la UEFA que su Juvenil no viaja a Turín
Debía jugar el miércoles, pero la situación sanitaria y el bloqueo de vuelos de Italia a España forzaron la decisión blanca. La UEFA no dio respuesta al club.
El Juventus-Real Madrid de octavos de final de la Youth League que debía tener lugar hoy, a partir de las 16:00 horas en la ciudad deportiva bianconera, no tendrá lugar. El Juvenil blanco no tomará esta mañana, como tenía previsto, el vuelo hacia Turín, pese a que la decisión de la UEFA desde la mañana de ayer era mantener el encuentro. Una decisión que causó incomprensión en el club blanco, pues desde el lunes el Comité Olímpico Italiano suspendió todas las competiciones bajo su paraguas hasta el 3 de abril, con la esperanza de que así el país transalpino pueda contener el brote de coronavirus, que se extiende con rapidez.
Pero los torneos internacionales quedaban fuera de esta decisión. Champions League, Europa League y Youth League son negocio de la UEFA y su decisión fue la de seguir. Con restricciones de público, pero la máquina futbolística europea no podía echar el freno. Una decisión ante la que el Madrid mostró su oposición y que provocó también quejas de algunos padres de jugadores (hay varios en el equipo blanco de Youth League por debajo de la mayoría de edad).
El duelo debía jugarse en pleno Piamonte, región pegada a Lombardía, que sufre los mayores problemas de propagación del virus y que se encuentra en cuarentena, así como otras 14 provincias. Las de Asti, Alessandria y Vercelli, que rodean Turín, están entre las provincias cerradas a cal y canto. Ante tales condiciones, el Madrid comunicó tanto a la UEFA como a la Juventus su postura de no viajar, reforzada además por la decisión que tomó ayer el Gobierno de suspender los vuelos directos desde Italia hasta el 25 de marzo, lo que complicaría el retorno del Juvenil blanco tras el duelo.
Una decisión no exenta de riesgos a posibles consecuencias, pues de hecho no se trata del primer abandono en la presente edición de la Youth League: el Inter de Milán ya se negó a disputar su partido de octavos contra el Rennes hace días, debido a que Milán está siendo una de las ciudades más castigadas por el coronavirus. La UEFA emitió un comunicado al respecto en el que dejó la puerta abierta a posibles castigos: “El Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA tomará una decisión sobre este asunto”. Pero en el Madrid se confía en que no se llegue a este extremo, considerando las condiciones actuales y los problemas de movilidad que la última decisión del Gobierno provocarían (haría falta un permiso especial como el que el Getafe ha solicitado para ir y volver a Milán para jugar contra el Inter en la Europa League).
La UEFA, inmersa en la vorágine que suponen los partidos de Champions y Europa League y con el agravante de la actual emergencia sanitaria, recibió la comunicación del Madrid pero no dio respuesta al club blanco. Se pusieron sobre la mesa todas las opciones: aplazar el encuentro o trasladarlo a una sede neutral, siendo la primera la preferida. Pero la UEFA mantuvo ayer su silencio, consciente de que esto es sólo el principio del problema y que en el horizonte hay dos fechas marcadas en rojo: el 30 de mayo es la final de la Champions en Estambul y el 12 de junio arranca la Eurocopa con un Turquía-Italia en Roma.