Ganar tres partidos seguidos, la asignatura pendiente este curso
En lo que se lleva de temporada, al conjunto rojiblanco le ha sido imposible encandenar tres triunfos. Este viernes visitan al Depor y pondrán a prueba su mejora a domicilio. Fuera solo han podido sumar 11 puntos en 13 encuentros.
El Girona está subido en la buena ola y quiere alargar al máximo una racha que le ha llevado a asentarse en los puestos de playoff y a soñar con el ascenso directo. Tiene tres puntos de ventaja respecto al séptimo clasificado, el Fuenlabrada, y vislumbra a cinco al segundo, el Almería. Pep Lluís Martí parece que ha vuelto a dar con la tecla y los dos últimos triunfos, ante Fuenlabrada y Huesca, han provocado que en Girona se respire un ambiente de optimismo y confianza. Además, encadenan dos partidos con la portería a cero y esto les hace ser un equipo más fiable. Eso sí, no bastará con todo esto para alcanzar el objetivo del ascenso porque este buen hacer debe prolongarse en el tiempo. Y si es sumando de tres en tres, mejor. De ahí que para este viernes, para el encuentro ante el Depor, el objetivo no sea otro que sumar el tercer triunfo seguido. Eso sí, hasta la fecha esto ha sido misión imposible.
La asignatura pendiente esta temporada está siendo la regularidad de resultados positivos y es que el techo del conjunto rojiblanco ha sido encadenar dos victorias. Con el momento actual ya son cuatro las ocasiones en que se ha vivido esta situación, pero nunca se ha acabado de redondear con un tercer triunfo consecutivo. En Riazor, ante el Depor, sería un buen momento para lograrlo porque, además de dar un golpe sobre la mesa, se acabaría con el buen momento de un conjunto gallego que muchos empiezan a verle como un candidato al playoff de ascenso si sigue por el camino triunfal que lleva desde la llegada de Fernando Vázquez. Llevan siete victorias seguidas y parecen imparables.
En Girona no se fían de un Depor al que vencieron 3-1 en la primera vuelta en Montilivi y es que la situación del rival ha variado. Y toca tener en cuenta que el conjunto gerundense, a domicilio, no se muestra tan fuerte como en casa. Es cierto que en el último duelo lejos de Montilivi, los rojiblancos vencieron al Fuenlabrada (0-1), pero esta temporada les cuesta obtener buenos resultados. En 13 duelos a domicilio, el botín ha sido de tan solo 11 puntos. Es, junto a la Ponferradina, el cuarto peor equipo de la categoría en este aspecto.
Pero en la ciudad, dentro del vestuario y entre la afición se respira optimismo y ello será necesario para poder sobreponerse a las estadísticas que indican que el Girona ha visitado en seis ocasiones Riazor y solo ha ganado una. Tres derrotas y dos empates completan el balance. Aunque el triunfo llegó la última vez que se enfrentaron, la temporada 2017-18, en Primera, y el resultado fue de 1-2 gracias a los tantos de Aday, de penalti, y Portu.