"La Copa es un partido a vida o muerte, todo puede pasar"
Carlitos Andújar y Álex García, jugadores del Cacereño, atienden a AS y tienen claro que no será fácil, pero avisan: "Al contrario que ellos, nosotros tenemos muchísimo que ganar".
"De diez partidos ganan nueve, pero en el fútbol todo puede pasar". Con estas palabras avisa Carlitos Andújar (Villagonzalo, 11 de abril de 1989), extremo del Cacereño, al Eibar, sus rivales del domingo en el Principe Felipe (12:00 horas). El conjunto extremeño era un caramelo envenenado en el sorteo copero. Recién coronados campeones invernales del grupo XIV de Tercera, la racha de cinco victorias consecutivas con la que llegan al choque ante los de Mendilibar ya borró del mapa de la Copa al Alcorcón (1-0, con gol de Gustavo), equipo dos categorías superior. "Somos realistas, como lo fuimos en primera ronda, pero lo afrontamos con muchísima ilusión y no tenemos ese miedo a caer eliminado. Al contrario que ellos, nosotros tenemos muchísimo que ganar", añade un Andújar que está siendo fundamental con sus goles en el buen momento verdiblanco: junto a Murci, lesionado, es el máximo anotador del decano en esta racha de cinco triunfos, con cuatro tantos.
A ese sentir se une Alex García (Bilbao, 24 de septiembre de 1984): "En Copa, a un partido... Mira el Mallorca, le ganó al Madrid en Liga. La ilusión que tenemos, con nuestra gente y que como digo, es un partido a vida o muerte, todo puede pasar". El extremo es un veterano curtido en mil batallas que ejerce de nexo de unión entre cacereños y eibarreses, dado que jugó en Ipurúa en la 2010-11: "Es un partido especial. Estuve un año, en Segunda B, quedamos campeones de grupo, jugamos la final de campeones contra el Sabadell y perdimos por el valor doble de los goles (0-0 fuera y 1-1 en casa); luego nos reenganchamos y nos pasó lo mismo contra el Alcoyano, con el mismo resultado". Ese agrio final no mancha el "buen año" que pasó el bilbaíno en el conjunto armero. De 'su' Eibar poco queda, aunque guarda una buena relación con Quique González, del que espera que "sea titular el domingo".
A Quique y al resto de atacantes de Mendilibar señala Carlitos: "Los más peligrosos son sus delanteros, se adaptan a todo tipo de partidos y de campos, juegue quien juegue será un martillo arriba". Además, el pacense también tiene su historia personal para con el Eibar: "Cuando jugaba en el Arroyo (2012-13), nos enfrentamos a ellos en tercera ronda, nos eliminaron en la prórroga (1-0). Fue un partido duro, oscuro, lluvioso, ... y nos privaron de jugar contra el Málaga en la siguiente ronda". A lo que añade: "Ese fue el Eibar que subió a final de año, y al año siguiente subió a Primera".
Aunque la Copa también ha regalado uno de los mejores recuerdos que guarda el futbolista de Villagonzalo: "Un año después, con el Algeciras, jugamos contra la Real Sociedad de Griezmann, Vela, Xabi Prieto,.... Empatamos en casa y perdimos en Anoeta (4-0), pero cuando todavía íbamos 0-0 en la vuelta mandé el balón al palo. Siempre tendré la duda sobre qué hubiera pasado, pero jugar en Anoeta contra esa Real fue inolvidable".
Como inolvidables califican los días que se están viviendo en Cáceres. "La gente te para por la calle y te da ánimos: 'Hay que ganar eh, como contra el Alcorcón, otro Alcorconazo'", desliza un Álex que además espera que el partido sirva como germen para potenciar la afición por el equipo: "Ojalá lo hagamos bien y la gente que lo vea le guste y se enganche al Cacereño. Que la gente que tenga dudas se ilusione a partir de ese día". "Se nota mucho que se está disfrutando en la ciudad. En Cáceres se llevan varios años en Tercera y este año se están haciendo las cosas muy bien, encima la Copa potencia todo muchísimo", añade Carlitos. "La 'nueva' Copa es la leche", comenta el extremeño, mientras que el vasco también se suma al carro de este nuevo formato: "Al menos para mí, es espectacular". A la par que ejemplifica la importancia de este tipo de choques: "Con el Alcorcón, por ejemplo, el equipo volvió a jugar con luz después de muchos años, esas son las cosas que se consiguen con estos partidos". (El viento derribó una torreta en enero de 2013 y, desde ese momento, la luz artificial había sido una quimera en el estadio cacereño. Antes del partido copero contra los madrileños se instaló una nueva torreta que devolvió la iluminación artificial al Principe Felipe siete años después).
Asimismo, destacan la capacidad camaleónica del equipo: "Nosotros normalmente llevamos el peso del partido, pero lo bueno del míster es que adapta. Si hay replegarse y buscar la contra, como contra el Alcorcón, pues se hace. Si te quitan la bola, pues te matas a correr detrás de ellos y a pillarlos a la contra", sentencia un Andújar que se muestra seguro de las posibilidades de su equipo. Álex lo tiene claro cuando se le pregunta si firma ganar con un gol de cada uno de los protagonistas: "Con que meta Carlitos, que está en racha, y ellos no marquen, me vale (ríe)".
A terminar la gesta inacabada de 2012
El Principe Felipe no recibe la visita de un Primera desde el 31 de octubre de 2012. El Málaga de Manuel Pellegrini, con jugadores como Isco, Joaquín, Saviola o Baptista en plantilla, visitaba a los verdiblancos y ambos conjuntos regalaban una eliminatoria vibrante. Los goles de Jaraíz, Chapi y Esteve por parte local y el doblete de Roque Santa Cruz y los tantos de Onyewu y Duda colocaron el 3-4 final en la ida. Los de Julio Cobos (mismo hombre al mando de la nave), lejos de rendirse ante un rival que se quedó a las puertas de las semifinales de Champions esa temporada, dieron la sorpresa en la Rosaleda y vencieron por cero a uno, con gol de Chapi. Además, Del Cerro Grande, colegiado del choque, anuló por fuera de juego un tanto a Checa en la segunda parte. El Cacereño remó y remó, pero murió en la orilla del área defendida por Kameni. El domingo, el Principe Felipe debe rugir como nunca para que el decano del fútbol extremeño escriba el último capítulo de la gesta que siete años atrás no se pudo rematar.