La 'desaparición' de Arthur Melo afecta al Barcelona
El brasileño fue descartado para el Clásico por lesión. El centro del campo azulgrana no dio la medida en el choque ante el Real Madrid.
Aunque no es un discurso unánime, hay quien añora a Arthur en el Barça. El discreto partido de los centrocampistas azulgrana en el Clásico desvió la mirada hacia el brasileño, lesionado y perdido en las últimas semanas como a finales de la temporada pasada, cuando dimitió en el momento que más se le necesitaba. Este verano pidió perdón a su manera cuando llegó a la gira por Estados Unidos tras sus vacaciones, de distintas fechas porque había jugado la Copa América. "El año pasado me equivoqué en la preparación física". Este año tampoco dan saltos de alegría con él en el club. Lo más sorprendente es que, otra vez, arrancó bien la temporada. Aunque llegó más tarde que el resto después de ser campeón de la Copa América con Brasil, se enganchó rápido al equipo. Fue determinante contra Osasuna, le hizo un golazo al Villarreal y pareció conectar bien con Leo Messi. Valverde le dio la orden de adelantar unos metros su posición para que su fútbol tuviese más sustancia y fuese más dañino. Todo iba bien hasta que regresaron sus problemas de pubis, rodeados también de cierta leyenda negra que acompaña al jugador hace algunos meses. El caso es que el Barça parecía más Barça con él por sus especiales características.
Por eso se le echó de menos ante el Madrid. Como a Busquets, que suele dar orden a la zona. Rakitic y De Jong estuvieron especialmente burocráticos y manejados por la superioridad numérica del Madrid y Sergi Roberto fue la elección de Valverde antes que Vidal porque el partido le reclamaba criterio en el juego. Que Valverde no encuentra el centro del campo es fácilmente constatable desde el mismo caso Rakitic. El croata no había contado en todo el curso y ahora lleva seis titularidades seguidas. Aleñá, cerca del Betis, también se ha asomado a las alineaciones. Vidal tampoco es feliz con sus minutos y sólo son fijos Busquets y De Jong. El holandés fue uno de los grandes perdedores del Clásico.