El Málaga tiene un plan para apuntalar la delantera
Sekou es uno de los atacantes cuyas condiciones económicas entran en los parámetros en los que se puede manejar el Málaga. También se quiere hacer profesional a Antoñín.
El Málaga tiene su principal carencia futbolística en la delantera. Y con el objetivo de paliar ese notable déficit trabaja la dirección deportiva liderada por Manolo Gaspar. Fichar al menos a un delantero es la prioridad con vistas al mercado invernal. Y en eso lleva semanas trabajando el Málaga. El plan para mejorar el ataque en enero tiene dos objetivos fundamentales. En primer lugar, incorporar a un delantero con las máximas garantías posibles dentro de las tremendas limitaciones que tiene el club por su delicada situación económica. Por otra parte, Manolo Gaspar pretende hacer una ficha profesional a Antoñín para poder aumentar de esta manera el número de jugadores del primer equipo a las órdenes de Víctor.
En cuanto a las negociaciones abiertas en el mercado para la llegada de un ariete, uno de los principales objetivos es el Sekou Gassama. El delantero rojiblanco fue durante muchas jornadas el máximo realizador del equipo rojiblanco, pero dejó de contar hace semanas y su futuro está lejos del estadio de los Juegos Mediterráneos. El Málaga inició los contactos hace tiempo, pero no es el único club que pretende al ariete, que marcó cinco goles en los primeros seis partidos del campeonato. Sekou es uno de los atacantes cuyas condiciones económicas entran en los parámetros en los que se puede manejar el Málaga. Pero el club de Martiricos tendrá competencia en la puja por el delantero del Almería. Es por ello que la dirección deportiva también baraja otras opciones.
Antoñín. El canterano renovará automáticamente el domingo si juega 45 minutos ante el Extremadura. Su contrato quedará prolongado hasta 2022 pero con ficha del filial. El Málaga pretende que ocupe desde el mes de enero ficha del primer equipo y con ese objetivo le presentó una propuesta hace varias semanas por el mismo tiempo, hasta 2022, y por las mismas cantidades, aunque repartidas de otra forma para cuadrarlas con las exigencias de LaLiga.