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VALENCIA

Las buenas decisiones veraniegas del Valencia

El Valencia no fichó a Fekir, Denis Suárez ni Rafinha el pasado verano y ahora resultan aciertos en la gestión deportiva de los de Mestalla

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Las buenas decisiones veraniegas del Valencia
Las buenas decisiones veraniegas del Valencia

El pasado verano fue uno de los más convulsos y movidos que se recuerdan en el seno del Valencia. Rumores de fichajes, rumores de traspasos, polémicas institucionales, proyectos que parecían ir destinados a un precipicio... Todo ello apenas semanas después de haber cerrado una temporada histórica en clave centenaria que acabaría en fiesta total a nivel deportivo con la clasificación para la presente edición de la Champions League y con la victoria en Copa del Rey ante el imponente Barcelona de Leo Messi.

El incendio era real. Nombres propios como Marcelino García Toral, Mateu Alemany, Anil Murty o Peter Lim eran tendencia casi omnipresente. Día sí, día también. Uno tras otro, creando una sensación de incendio, de terreno candente, de inestabilidad, que muchos todavía recuerdan con cierto ardor de estómago.

Evidentemente, el verano se traduce en movimientos. Unos movimientos de mercado que se convierten en la gran fuente de ilusión, de decepción, para unos aficionados que intentan sobrevivir a diario con ese vacío temporal entre el final de una temporada y el inicio de la siguiente, con ese vacío casi existencial conscientes de que la actualidad deportiva está parada, pausada, y que sólo el mercado de fichajes parece ser el gran foco de interés.

El Valencia tuvo sobre la mesa nombres propios que sonaron con fuerza para reforzar la plantilla y el proyecto de la presente campaña 2019/20, pero que se tradujeron en polémicas populares en la capital del Turia al no traducirse en altas, al no confirmarse oficialmente. Y para más acento negativo, al ver que esos objetivos acababan cerrándose para otros equipos españoles que, a priori, parecían partir por debajo del combinado valencianista en el mes de agosto, con el pistoletazo oficial de salida.

Tres nombres por encima del resto. Tres rumores que sonaron con fuerza a nivel informativo, con bases sólidas, con argumentos reales, pero que no se tradujeron en refuerzos valencianistas: Fekir, Denis Suárez y Rafinha. Tres futbolistas de primer nivel que, por unas cuestiones u otras, no se convirtieron en nuevos jugadores del Valencia y que, como consecuencia, ayudaron a que el incendio mediático institucional que parecía haberse instalado en los aledaños de Mestalla, que parecían estar presentes en la Avenida de Suecia y alrededores, aumentara día tras días.

Los no-fichajes de Fekir (acabaría en el Real Betis), Denis Suárez y Rafinha (acabarían ambos luciendo la camiseta del Celta de Vigo) crearon una confrontación entre las altas esferas del club y la gestión deportiva. Mientras que Mateu Alemany y Marcelino pensaron Rafinha y Denis, desde las bambalinas seguían líneas diferentes, alejadas a las pretensiones del staff deportivo. Otra línea discordante fue Fekir, opción de Lim, mientras la dupla Marcelino-Mateu apostaban por Bakambu. Finalmente, ninguno acabaría cerrando sus respectivos fichajes por el Valencia. Estos desacuerdos serían, semanas después, una de las claves que echarían por tierra el exitoso proyecto del club.

Sin embargo, aquellas situaciones que no fueron bien recibidas en Valencia, que fueron asimiladas como una mala decisión del club por dejar escapar jugadores de nivel que estaban dispuestos a llegar al equipo, ahora parece que han cobrado fuerza, que han sufrido una metamorfosis y, viendo el nivel mostrado por esos objetivos valencianistas en estos primeros meses de temporada, quizás puedan ser consideradas incluso como buenas decisiones.

  • Nabil Fekir: quizás sea el jugador que mejor rendimiento esté ofreciendo, pero sus cifras son bajas respecto a las expectativas creadas desde su fichaje por el Real Betis procedente del Olympique de Lyon. Apenas 3 goles en 11 encuentros disputados. Un rendimiento que, además, ha ofrecido una imagen alejada a lo que solía verse en Ligue1 los últimos años. No mejora, por ejemplo, las cifras de Maxi Gómez (5 goles en 12 partidos ligueros), quien sí acabaría luciendo la elástica blanquinegra.

  • Denis Suárez: está teniendo mucho protagonismo deportivo (ha disputado ya 1005 minutos ligueros en 13 encuentros), pero su rendimiento no está siendo el esperado. Su magia no aparece. Su determinación no ha conseguido instalarse con sus mejores galas. Y a nivel goleador, además, sólo se ha traducido en 1 gol para el Celta de Vigo. 5 centrocampistas del Valencia igualan o superan sus cifras con la misma cantidad de minutos, incluso con porcentajes menores.

  • Rafinha: la gran decepción del conjunto celeste. De nuevo, la irregularidad adueñándose de su rendimiento. Lesiones que han comenzado a limitar su protagonismo desde tempranos momentos de la temporada y hasta ahora sólo ha podido disputar 9 de los 13 encuentros ligueros de su equipo, de los cuáles sólo 2 fueron de forma completa. Todavía no se ha estrenado como goleador y su determinación sigue estando muy alejada a su mejor versión.

Tres fichajes que apuntaban alto en verano y no se han traducido en lo esperado, que no han cumplido expectativas, y sus respectivos equipos han firmado decepcionantes inicios de temporada con ambos clubes jugando de forma peligrosa cerca del descenso. Tres jugadores descartados por el Valencia que en tónica veraniega fueron asimilados como errores por verles escapar a rivales del mismo campeonato que, ahora, viendo lo ocurrido, quizás no fueron del todo decisiones erróneas en el seno valencianista.

Fekir, Denis Suárez y Rafinha no han rendido como se esperaba en este primer tramo de curso deportivo. Lesiones, irregularidad y un nivel por debajo de lo esperado han convertido tres operaciones catalogadas de notables en verano en casos decepcionantes, grises, que ahora resultan haber sido descartes acertados por parte de la institución valencianista.