Correa responde con asistencias a la confianza de Simeone
El argentino fue el jugador más destacado del partido contra el Athletic y fue capital en los dos goles del Atlético. Jugó arriba, su posición natural.
Ángel Correa tuvo prácticamente los dos pies fuera del Atlético durante el verano. El jugador veía con buenos ojos la opción de salir en busca de una mayor trascendencia en otro equipo, con el Milán como gran candidato, mientras que el equipo rojiblanco veía como su salida facilitaba la llegada de otro delantero, con Rodrigo Moreno como el elegido. Mientras las negociaciones con los rossoneros se dilataban, Simeone seguía contando con el argentino partido tras partido, gol incluido en la gran noche sobre el Real Madrid en Estados Unidos (3-7).
Sin embargo finalmente el trasvase de jugadores no se produjo y Correa continuó en el Atlético. Simeone anunció desde el verano algo que volvió a comentar tras su gran partido contra el Athletic, que volvería a jugar arriba y no en la banda donde el '10' está más cómodo. "Siempre ha sido delantero y lo hemos puesto en un sitio donde él no se siente comodísimo. Ha hecho un gran esfuerzo para dar lo mejor de sí para explotar esa banda derecha, pero su posición natural es de delantero y en esa función es donde puede desarrollar sus virtudes, su giro, tiene fuerza en los primeros pasos y lo hizo muy bien. Correa mostró lo que vale. Morata viene dos partidos haciendo goles. Y queremos que Diego se enganche a esta situación porque es importante para nosotros" declaraba el Cholo tras el encuentro de ayer.
Un partido donde Correa fue el mejor y fue completamente determinante con dos asistencias. Además estuvo cerca de ver puerta, pero su vaselina se marchó fuera. En el primer tanto recibió de Saúl y tras un magnífico control y un espectacular gambeteo en el área dejó de cara para que el propio centrocampista marcase tras tocar en Íñigo Martínez. En el segundo recibió de Koke en el área y puso un centro tenso al segundo palo que Morata sólo tuvo que empujar.
El argentino era titular por tercera vez en la temporada. La anterior había sido el martes contra el Bayer Leverkusen, en esa ocasión acompañando a Diego Costa. Simeone había apostado por Morata y Costa arriba con continuidad, pero los dos arietes hacen movimientos similares y no tienen las características para bajar a recibir entre líneas, una de las grandes virtudes de Correa en la función que hasta el año pasado ejercía Griezmann. El argentino no estuvo bien en Champions, pero ofrece un registro diferente a los dos puntas. Se ofrece por abajo y es más rápido en espacios cortos tratando de girar para buscar el último pase.
El agitador de los partidos
Todavía con 24 años, Correa ha ido aumentando su trascendencia desde el inicio de temporada. A un inicio de curso con la mente turbada con su futuro, el argentino añadió a una sanción de dos partidos que arrastraba desde el curso pasado una enfermedad que le impidió debutar hasta la cuarta jornada. Pero fue ganando trascendencia hasta recuperar su papel habitual en la plantilla, el encargado de revolucionar los encuentros donde el marcador no es favorable. Ante el Valladolid volvió a ser el primer cambio (como había ocurrido contra Juventus, Mallorca y Real Madrid) y a punto estuvo de ser efectivo, con un remate a la madera que hubiese supuesto el triunfo.
Ahora, y aprovechando las lesiones de João Félix y de Vitolo, ha ganado minutos hasta hacerse con un puesto en el once que en este momento ya parece difícil de arrebatarle. Simeone sigue dándole oportunidades y mostrando su confianza en él y Correa ha comenzado a corresponderle. Con partidos como ante el Athletic, el argentino será un jugador importante este curso.