Oportunidad para alejarse de la zona de alto riesgo

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Ania y Luis Carrión coincidieron hace 15 años, como jugadores, en el Nàstic de Luis César Sampedro. Hoy en El Sardinero, en bandos distintos, volverán a coincidir. En el espacio (aunque Ania, sancionado, no estará en el banquillo) y, sobre todo, en su pretensión de que sus respectivos equipos ahoguen la salida del rival. Presión muy alta. La gran incógnita es si el Racing aceptará el envite como lo hizo en pretemporada ante el Valladolid o el Athletic, arriesgando desde el área chico, con Luca y sus centrales jugándose el físico, o si responderá con pelotazos en largo buscando a Nuha, que no le ha ido mal en los últimos partidos, aunque queda regular reconocer que se hace fútbol directo.

Tras estar 49 partidos ligueros sin repetir un once, hasta que lo hizo en El Molinón, todo apunta a que el técnico ovetense, pese a tener que gestionar tres partidos en ocho días, seguirá manteniendo el bloque. No podrá hacerlo con el once, porque Kitoko, con molestias musculares, no entrará en la convocatoria y entre Sergio Ruiz y Ari Nkaka se jugarán la plaza de acompañante de Mario Ortiz por dentro.

Sí rota. El Numancia se presenta en Santander con novedades en su convocatoria. Carrión ha dejado en Soria a hombres como Guillermo y Nacho. La entrada de Moha hace especular por ver de nuevo en la banda derecha al canterano y a Calero. Una conexión que según se vio en anteriores encuentros funciona. Higinio jugará arriba, con la ayuda en ataque de Zlatanovic. Al serbio se le ven formas, pero aún tiene que explotar. La otra gran novedad estará en el centro de la defensa. Gutiérrez volverá a ser pareja de Derik. El que no estará será Escassi por sanción. El resto del once será el habitual, con Gus Ledes y Otegui en la dirección del juego numantino. El equipo quiere quitarse el fantasma del bajón en los partidos lejos de Los Pajaritos y saldrán a por todas en el Sardinero.