Joaquín es la baza de oro que lidera al Betis de Rubi
El futbolista portuense lleva jugados 524 partidos en Primera. Sus tres asistencias en el partido ante el Levante reflejan su brillo actual.
La importancia de Joaquín en el actual Betis ya no acrecienta ninguna duda. Ni sus 38 años suponen un freno para que el portuense siga siendo un líder en el nuevo proyecto en manos de Rubi. Cumplió 524 partidos en Primera tras su brillante actuación ante el Levante y supera en esa histórica carrera a Manolo Sanchís (523) para colocarse en el quinto lugar. La historia sólo le mantiene detrás de Zubizarreta (622), Raúl, Eusebio y Buyo. Toda una demostración de fuerzas que pretende tener más continuidad.
Sus cifras no quedan ahí. Además de brillar en Primera con Betis, Valencia y Málaga, se marchó a Italia para jugar en dos campañas casi 50 partidos de la Serie A, además de seguir incrementando sus apariciones en competiciones europeas. Ya son 712 partidos como profesional en clubes. Sus 213 victorias en la Liga española reflejan también su grado de rendimiento: el portuense ya suma 90 asistencias y sólo Messi (162) tiene más entre los jugadores activos de LaLiga.
Su nueva campaña como capitán del Betis arrancó con ciertas incógnitas. ¿Sería capaz de rendir a su mejor nivel tras la marcha de Quique Setién y la llegada de Rubi? La respuesta se refleja en las seis jornadas disputadas hasta el momento y en su protagonismo como pieza decisiva en los dos triunfos firmados por el equipo verdiblanco.
Rubi le entregó ya total libertad sobre el campo desde el inicio de curso, aunque también vislumbró ante el Levante que podía ser más incisivo jugando más pegado a la banda derecha, en esa posición en la que tanto brilló desde que debutó en Primera el 26 e agosto de 2001. Y así fue: tres asistencias y una conexión letal con Loren y Borja Iglesias que promete alegrías para el beticismo.
El contrato de Joaquín expira al final de esta temporada, pero no es una circunstancia que preocupe a ninguna de las dos partes. El club ya avisó que esa cuestión estará en manos del futbolista y éste desea alargar su rendimiento sin fecha de caducidad. "Tengo que renovar mi DNI", bromeaba ayer. Su liderazgo es real.