El Real Madrid, ni veteranos ni noveles en París
El equipo no compareció en el Parque de los Príncipes. A Zidane no le funcionaron ni las estrellas, ni las promesas, y de ello se benefició el PSG.
El colapso del Madrid, perdido casi de principio a fin en el Parque de los Príncipes, alcanzó a todas las líneas. Al contrario que en el PSG, a un nivel general muy alto, en el equipo de Zidane no resultó la mezcla.
Veteranos
La defensa hizo aguas, empezando por su custodio, Courtois, que no dio el paso al frente que se esperaba ante la sombra de Keylor y ya lleva encajados nueve tantos en cinco encuentros esta temporada. Pudo hacer más en los dos primeros goles: en el 1-0 no protegió su palo y en el 2-0 reaccionó tarde a un tiro de media distancia. No le ayudaron en nada, prácticamente lo contrario, Varane, especialmente retratado en el primero y en el tercero de los parisinos, ni Carvajal, que falló en el 1-0, no apareció por el 3-0 y viene dejando muestras de su peor nivel desde que volvió de Alemania en 2013.
En el centro del campo, Kroos no pudo coger el timón. En él recaía esa responsabilidad que no asumió pese a que su inicio de temporada ha sido notable. También había iniciado el curso en forma Benzema, que sin embargo pinchó en otra gran cita, algo que ya se le afeó la pasada temporada, cuando entre febrero y marzo, en el mes en el que se despeñó el Madrid, se quedó en tres goles en nueve partidos. En París, como el resto de sus compañeros, ni probó a Keylor.
Noveles
De los jóvenes, llamados a levantar el Madrid del futuro con la urgencia del ahora, quien más señalado salió fue Militao (21 años). Fue retratado en las fotos de los tres goles de los de Tuchel: en el primero no encimó el tiro de Di María, en el segundo no achicó en la frontal y en el tercero, sin nadie que le echara un cable, fue bailado junto a Varane por Meunier y Bernat, los dos laterales del PSG.
En la segunda parte, Jovic (21) y Vinicius (19) tuvieron su oportunidad, si así se le puede llamar teniendo en cuenta el escenario que les esperaba: un Madrid 2-0 abajo y descosido. El serbobosnio salió para 20 minutos, Vinicius para apenas 12. Ninguno sumó, lo que a pocos sorprendió... aunque estos marrones también sirven para cambiar carreras.