Modric cumple 34 años entre dudas por su rol en el Madrid
Su suplencia en Villarreal extrañó a todos, sobre todo ante la carencia de centrocampistas en la plantilla. Es su octavo curso en el Madrid, donde ha levantado 15 títulos.
Luka Modric cumple hoy 34 veranos. El menudo centrocampista croata nació el 9 de septiembre de 1985 en Zadar, ciudad costera situada en la parte central de Croacia; 34 años en los que el balón le ha llevado a jugar en el HSK Zrinjski de Mostar, de la liga bosnia; en el Inter de Zapresic, ciudad croata cercana la frontera con Eslovenia; en el Dinamo de Zagreb, uno de los dos grandes de su patria; en el Tottenham londinense; y en el Real Madrid, donde ha alcanzado su cénit. Además, claro, de en la selección croata, a la que llevó hasta la final del pasado Mundial de Rusia 2018, un mérito que, combinado con sus repetidos éxitos europeos con el Real Madrid, le hizo merecedor del Balón de Oro 2018. Hasta diciembre, sigue siendo el vigente ganador del galardón; y sin embargo, su última temporada y el arranque de la presente generan dudas a corto plazo.
De la temporada 2018-19 de Modric poco bueno se puede decir, si bien es cierto que poco bueno se puede decir del Real Madrid en general, pequeñas excepciones (Benzema, Llorente, Reguilón, Vinicius...) aparte. El croata coqueteó tras el último Mundial con una oferta del Inter de Milán que incluía, además, un salto al fútbol chino, pero al final se quedó con mejora de salario incluida. El Inter amagó con regresar a por él este verano, pero quedó en un mero intento lejano. Su actual contrato le vincula con el Madrid hasta junio de 2021, aunque está por ver cuál va a ser su rol esta temporada. Los primeros partidos no ofrecen señales muy optimistas.
Modric arrancó como titular en el triunfo del Madrid en Vigo ante el Celta (1-3), aunque su concurso acabó en el 56' cuando fue expulsado por roja directa, por una de esas entradas al talón de Aquiles que este curso tienen los colegiados marcadas en rojo. De ahí que se perdiese el debut liguero en el Bernabéu, ante el Valladolid (1-1). La sorpresa llegó cuando Zidane no le eligió entre los once titulares para visitar una plaza siempre complicada como es Vila-real; el técnico optó por Casemiro y Kroos nada más, con Bale y Lucas en las alas y Benzema y Jovic en la punta de ataque. Modric tuvo 22' en la segunda parte nada más, algo que extrañó a todos puesto que llevaba más de dos semanas sin jugar en partido oficial.
Una ausencia aún más destacable habida cuenta de la composición de la plantilla blanca, con sólo seis medios puros para afrontar todo el curso y con una edad media de los centrocampistas por encima de los 27,6 años. La sensación general es de que Zidane quiere transmitir un mayor vigor al mediocampo blanco, motivo por el que insistió tanto en Pogba durante el mercado de fichajes y por el que ha mostrado predilección por Valverde desde que regresó al Madrid; el uruguayo muestra un perfil mucho más físico y de recorrido que otros jugadores en los que el técnico marsellés ya dejó clara su poca confianza, como Ceballos o Marcos Llorente.
Noveno curso, 15 títulos
Modric llegó al Madrid habiendo ganado sólo títulos en su Croacia natal: tres Ligas, dos Copas y una Supercopa del país balcánico. Su paso por el Tottenham fue fructífero en términos personales, pues le puso en el mapa europeo jugando en un equipo acostumbrado a practicar un fútbol más estético y de toque que el que es tradicional en Inglaterra. Y en el Madrid le llegaron al fin los títulos; hasta 15 ha sumado de blanco: cuatro Champions League, cuatro Mundiales de Clubes, tres Supercopas de Europa, una Liga, una Copa y dos Supercopas de España.