Gareth Bale, ante su peor fantasma: el Santiago Bernabéu
El galés volverá a jugar en el coliseo madridista 156 días después de su última aparición (ante el Athletic, 3-0), donde recibió numerosos pitos y críticas de la afición la pasada temporada.
Gareth Bale se enfrenta esta semana ante el peor de sus fantasmas: volver a jugar en el Santiago Bernabéu. Tras su buena actitud y disposición ante el Celta, el internacional galés regresará el sábado al estadio madridista para disputar la segunda jornada del campeonato ante el Valladolid (19:00 horas). Será el momento de saber si se ha ganado el perdón de la afición tras su brillante actuación ante el conjunto celeste.
Cierto es que su situación ha dado un giro de 180 grados en sólo una semana: de no contar apenas para Zidane (apenas había jugado 73 minutos en seis partidos de pretemporada antes de jugar 31 en el último encuentro amistoso ante el Roma), a ser titular ante los celtiñas y asistir a Benzema en el primer gol tras una brillante jugada personal, ahora debe demostrar sus credenciales ante una afición que no le ve jugar en el coliseo de La Castellana desde el pasado 21 de abril (para ver a Bale siendo titular en el estadio de Chamartín hay que retrotraerse hasta el 6 de abril, en la victoria ante el Eibar (2-1)). Entonces actuó 20 minutos: salió sustituyendo a Lucas Vázquez, pero le dio tiempo a asistir a Benzema en el triunfo ante el Athletic (3-0). Como el pasado sábado en Balaídos. Previamente, en su salida al terreno de juego, había recibido pitos por parte de la afición madridista, lo que le llevó a hacer un gesto irónico de aprobación al respetable. Ese fue el culmen de una temporada extraña para el galés en su relación con la grada del estadio Bernabéu. Tras empezar como un ciclón, con grandes actuaciones en Liga (Leganés, Getafe) y Champions (Roma), las derrotas consecutivas ante equipos como el Alavés (1-0) y Levante (1-2) hicieron que las cañas se tornasen lanzas y el galés empezase a escuchar música de viento en sus apariciones. Sin ir más lejos, ante el conjunto granota, el galés pidió que la gente animase en vez de pitarles y empezó a ser el centro de las críticas de la afición blanca. Incluso se llegó a ir antes del final del encuentro que el Madrid perdió ante la Real Sociedad a primeros de año...
Desde entonces, octubre de 2018, cada aparición de Bale fue saludada con pitos. Sería en el encuentro de vuelta de Copa ante el Barcelona (0-3) cuando la gente emitió su veredicto: no quería al galés. Así fue hasta el final de la temporada. Incluso la mayoría de los aficionados esperaban que Zidane le permitiera despedirse en el último encuentro de la pasada Liga, pero el técnico le dejó en el banquillo todo el encuentro ante el Betis (0-2).
Ante el Valladolid, 156 días después de su última aparición en el coliseo blanco, Bale volverá a enfrentarse a sus fantasmas: volver a jugar un encuentro con la camiseta del Madrid en el estadio Santiago Bernabéu. No marca en el estadio blanco desde el pasado 16 de marzo (han transcurrido 192 días), cuando cerró el resultado de los blancos ante el Celta (2-0) en el redebut de Zidane como entrenador blanco. Veremos cómo se le da su regreso a la competición en el estadio donde tanto se le criticó la temporada pasada...