El Alavés pregunta por Embarba
La operación podría abaratarse al entrar la cesión de Saúl de por medio. El Alavés necesita reforzar las dos bandas ofensivas y, en un momento dado, la delantera.
El Alavés ha preguntado al Rayo Vallecano por la situación de Adrián Embarba, un incuestionable para Paco Jémez y uno de los capitanes del conjunto franjirojo. Tiene contrato en vigor hasta 2021 pero le gustaría jugar en Primera en la 2019-20. También se han interesado por sus servicios Celta, Betis y Villarreal además de algunas entidades del extranjero, tal y como adelantó AS.
La competencia es obvia porque se trata de un centrocampista de banda derecha con mucha capacidad de regate y desborde. El Alavés no dispone ahora mismo de capacidad para fichar. Su principal objetivo es dar salida a algunos futbolistas para bajar su masa salarial. La LFP le ha dado permiso para gastar 38 millones de euros entre operaciones de cesiones y fichajes además del salario del resto de la plantilla. Y ya ha tocado techo. O confirma salidas o no dispone para incorporaciones.
Pero el Rayo está interesado en la cesión de Saúl García, lateral izquierdo que ha sido fichado recientemente procedente del Depor y que no ha encontrado sitio en la primera plantilla por la presencia de Rubén Duarte y de Adrián Marín. Al final sólo caben 25 porque esas son las fichas que te permite tramitar la Liga de Fútbol Profesional. La operación Embarba podría abaratarse al entrar la cesión de Saúl de por medio. A Garitano le hace falta reforzar el centro del campo y, más en concreto, las bandas ofensivas.
Tras la salida de Twumasi al Gaziantep, en la derecha está sólo Aleix Vidal ya que Burgui continúa convaleciente de su operación de ligamento cruzado anterior de la pasada temporada. Ahí encajaría Embarba como anillo al dedo. En la banda izquierda está Luis Rioja solo y hace falta alguna incorporación para reforzar la demarcación. También es cierto que Duarte puede jugar en el lateral y Adrián Marín en el centro del campo, pero la zona quedaría un poco desangelada si no llegan refuerzos de aquí al 2 de septiembre. Calleri, por último, sigue en la recámara. Hace falta que sus propietarios (Grupo Maldonado) acepten una cesión y no un traspaso.