John Carlin: "El fútbol es el arma que acabaría con el Brexit"

En 'This is Football' tratan de explicar el fútbol mediante seis historias. Ustedes definen a este deporte como la religión con más adeptos del mundo, ¿qué criterio eligieron para escoger seis historias entras miles que pueden ilustrar el fútbol?

Podían ser seis como 600.000. Lo que necesitábamos eran personajes interesantes, con carisma que pudieran dar una emoción al relato que queríamos dar. Luego también hubo motivos personales. Mi vinculación con Ruanda, un país que fue devastado por un genocidio salvaje y que se reconcilió por el fútbol.

Los capítulos de la serie coinciden en reivindicar el fútbol más puro, casi inocente y sanador. ¿Cree en el poder reconciliador del fútbol?

En el primer capítulo es obvio. Habla de lo que pasó con el fútbol tras el desastre entre hutus y tutsis. Un poco como lo que pasó con el rugby en Invictus.

El único nombre propio al que dedican un capítulo es Messi, ¿por qué?

No tocamos su personalidad, la persona Messi no nos interesa. Queremos centrarnos en el artista. Es como si hacemos una película sobre Mozart, que seguramente como persona podía dejar mucho que desear, pero que creaba una música fantástica. Con Messi quisimos hacer una celebración del fútbol arte y también verle desde un punto analítico. ¿Vio el capítulo?

Sí

Se ve como un israelí y un palestino celebran igual sus goles cuando en otra situación se matarían, pero reaccionan a los goles de Messi de igual forma y eso es como un canto de amor o de celebración a una época como la actual que se define por ese deporte minoritario que es la política respecto al fútbol.

¿El fútbol puede más que la política?

El fútbol es global. Nosotros buscamos historias fuertes e impactantes más allá de cualquier mensaje político. El fútbol es la mayor religión del mundo y empezó en un pub de Londres hace 150 años.

Viendo su serie uno sale muy optimista. ¿Ahora explíqueme cómo es que este mensaje tan evangelizador puede ser compatible con que el Mundial se juegue en Qatar?

Este tema nos da mucho material a los periodistas, como pasa con Mourinho, los malos de la peli son fundamentales porque generan la gran conversación del fútbol.

Volvamos a Qatar…

Yo he escrito mucho de Qatar y me parece una tomadura de pelo que se haga un Mundial allí. Pero lo mas importante no es la corrupción de FIFA y demás.

Entonces, ¿qué es?

Mire, a la mayoría de los aficionados estos tejemanejes les importan un pito. Soy periodista y vivo de esto pero le explicaré una anécdota.

Por favor…

En 1986, hace pues 33 años, un periodista amigo mío hizo un reportaje sobre Joao Havelange con motivo del Mundial de México y yo estuve con él. Y la corrupción supuraba por todos los poros de la organización. Pero sabe una cosa, que a mí me gusta demasiado el fútbol como para pensar que esto de la corrupción pueda estropearlo. Es como Papa Noel o los Reyes Magos.

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¿Perdón?

Cuando eres un niño de 8 ó 10 años y empiezas a sospechar sobre la realidad de estos fenómenos tan bonitos, pero no quieres verla porque tal y como te la contaron es más bonita. Los aficionados del fútbol adoptan la misma postura. No quieren saber ciertas cosas, quieren disfrutarlas. Al aficionado no le expliques estas cosas cuando empieza el partido.

¿Dónde está el secreto?

En el fútbol lo más importante es el punto dramático, no la belleza del juego. Lo más grande es el suspense tremendo que genera. Este es el único deporte en el que te puedes pasar días o años discutiendo sobre si ese gol era legal.

¿No teme que esa fuerza del fútbol pueda servir también para enfrentar, para dividir y manipular?

Me sorprende lo subexplotado que está el fútbol en ese aspecto. Con el fútbol se suspenden los procesos racionales y es ahí cuando estás más vulnerable para recibir un mensaje. Lo utilizan poco, ya sea para bien o para mal. Hay una fuerza enorme ahí que no se utiliza suficiente y alguien tomará consciencia de eso. En Colombia el presidente Santos utilizó el fútbol y el ciclismo para favorecer el desarme. Mandela, que era un genio, utilizó el rugby para manipular la ilusión de la gente.

Pero en los Balcanes pasó al contrario…

Si hacemos otra temporada de la serie puede que hablemos de eso, pero a lo que voy es que hay mucho campo por utilizar. Hay una potencia y una energía tremenda.

¿Una Liga Europea uniría o desuniría el proyecto europeo?

Yo no lo veo, pero igual soy un viejo conservador y puede que cuanto mayor te haces, más en contra estás de los cambios en un deporte que amas. Si no está roto para que arreglarlo. Sería una pena perder la intensidad de las ligas locales y si esto se propone, los ingleses se opondrán a muerte.

Un tema que le toca, ¿el fútbol puede hacer algo ante el Brexit?

Bueno, bueno… rápidamente le digo: si alguien quiere comprobar la fuerza del fútbol, ahí está el Brexit. El día que alguien le diga a estos inglesitos favorables al Brexit que se tienen que acoger a él con todas las consecuencias y eso es: ni Champions, ni Europa League, ni jugadores europeos ni entrenadores europeos en la Premier ya verá como el tema se acaba en un segundo.

¿Esa es la fuerza del fútbol?

¿Cuánta gente en el mundo puede tener una conversación inteligente sobre el Brexit?

No sé…

Unas tres personas, calculo. Pues sobre fútbol la podría tener con toda la nación. Un referéndum sobre la selección sí que sería una consulta vinculante y con criterio.

¿Sería ese el típico argumento que usaría en sentido contrario Boris Johnson?

Con el fútbol liquidamos a Boris y acabamos con el Brexit.

¿Cree que puede llegar a tanto?

En Ruanda, donde se perpetró un genocidio de un millón de muertos, los hutus y los tutsis se unieron en torno al fútbol. El partido en el que vencen a Ghana resume la potencia de este deporte. Se puede.