El Real Madrid sale dormido
11 de los 16 goles encajados por los blancos este verano han ocurrido en las primeras partes. En cambio, los segundos tiempos arrojan datos más halagüeños.
La victoria que Zidane reclamaba en el postpartido ante el Tottenham llegó, pero no parece ser lo único que el equipo necesite. La debilidad defensiva mostrada en esta pretemporada es manifiesta, como así atestiguan los 16 goles encajados en solo cinco partidos. Sin embargo, hay algo aún más preocupante, 11 de esos tantos han llegado en la primera parte de los partidos, claro indicativo de que el Real Madrid sale dormido en los partidos.
Los hombres de Zizou no están sabiendo afrontar los primeros minutos de los partidos, convirtiendo las segundas partes en muros muy difíciles de franquear. El mayor o menor rodaje, o la mayor o menor calidad de los equipos enfrentados no debieran ser utilizados como excusa. El Fenerbahçe terminó la pasada campaña en la sexta posición de la Süper Lig turca y venía de ser vapuleado por el Bayern Munich en un resultado más próximo al tenis que al deporte que nos ocupa (6-1), mientras que el Atlético había disputado dos amistosos veraniegos, al igual que los blancos, antes de sonrojarles en Nueva Jersey. La desconexión es manifiesta y, de no ser por las grandes intervenciones de Keylor en la tarde frente al Tottenham, la avería podría ser incluso mayor.
Equipo | Jugador | Minuto |
Bayern | Tolisso | 15 |
Arsenal | Lacazette | 10 |
Arsenal | Aubameyang | 24 |
Atlético | Costa | 1 |
Atlético | Joao Félix | 8 |
Atlético | Correa | 19 |
Atlético | Costa | 28 |
Atlético | Costa | 45 |
Tottenham | Kane | 22 |
Fenerbahçe | Rodrigues | 6 |
Fenerbahçe | Dirar | 34 |
TOTAL | 11 |
No obstante, no todo lo que rodea la pretemporada blanca está cargado de matices negativos. En tanto que los primeros 45 minutos tienden a ser una auténtica carrera de obstáculos para los de Chamartín, el equipo sufre un lavado de cara reseñable en los descansos y se reincopora con bríos renovados. De los cinco encuentros disputados, se han conseguido tres victorias (Arsenal, Atlético y Fenerbahçe), un empate (Tottenham) y una sola derrota (Bayern). Resultados indicativos del cambio que sufren los jugadores tras el paso por vestuarios.
Madrid vs | Primera parte | Segunta parte |
Bayern | 0-1 | 1-2 |
Arsenal | 0-2 | 2-0 |
Atlético | 0-5 | 3-1 |
Tottenham | 0-1 | 0-0 |
Fenerbahçe | 2-2 | 3-1 |
Los mejores momentos de esta gira de pretemporada se han observado a partir del minuto 46 de los partidos, destacando especialmente la ilusionante franja temporal en que se igualó el 2 a 0 adverso contra el Arsenal inglés con Asensio y Bale a la cabeza, antes de que el infortunio y la indolencia se apoderasen de balear y galés, respectivamente. En algunas ocasiones, como en el partido jugado ante los de Simeone, la losa era demasiado pesada de levantar. Sin embargo, el conjunto capitalino consiguió maquillar un resultado que podría haber sido incluso mayor de haber continuado la tendencia con que se llegó al minuto 45.
Este cambio de actitud no es algo nuevo en los equipos del entrenador francés, ya que este fenómeno también se observó a su vuelta al banquillo madridista la pasada temporada. "Nos ha dicho cuatro cosas al descanso y hemos salido como hemos salido. Se ha notado", afirmaba Sergio Reguilón en abril, tras remontar un encuentro ante el Eibar. No sabemos de la intensidad ni forma de esas charlas de Zidane en los vestuarios, lo que está claro es que consigue el efecto deseado en la mayoría de los casos. No podemos decir lo mismo de los instantes previos al pitido inicial. El técnico galo debe encontrar la tecla para hacer funcionar a su nuevo Real Madrid durante la completa totalidad de los partidos.