La devaluación de la plantilla complica la operación salida
Jugadores como Bale, al que quiere vender el club, Isco, Asensio o Kroos han sufrido una fuerte caída en su valor de mercado en el último año.
Hace poco más de un año, el Real Madrid conquistaba su decimotercera Copa de Europa y sus jugadores figuraban entre los objetivos de los grandes clubes europeos. Bale marcó uno de los mejores goles de la historia de las finales y amenazó con irse si no disfrutaba de más minutos. Isco era tentado por el Manchester City, Marcelo por la Juventus y Kroos por el United. Sin embargo, apenas 365 días después, todos estos jugadores permanecen en el conjunto blanco, aunque con un estatus bien distinto.
Las heridas del pasado curso continúan vigentes en el corazón de la actual plantilla. Gareth Bale, uno de los grandes señalados para salir, ha visto mermado su valor de mercado desde los 90M€ a los 60M€ en poco más de un año. Las únicas ofertas que han llegado al Santiago Bernabéu por el galés han venido de China y pretendían llevarse al jugador prácticamente gratis. Con esta vía cerrada, la Premier League asoma en el horizonte, pero su salario estratosférico, unido a un valor decreciente, hace difícil pensar que el delantero pueda salir por el precio que el club piensa que vale el jugador.
Por el contrario, esta dinámica no es sólo cosa de Gareth Bale, sino que se extiende a casi el total de los jugadores del conjunto blanco. Según la tasación hecha por Transfermarkt, Isco ha pasado de valer 90M€ en octubre de 2018 a 60M€ en estos momentos. Kroos está fijado en un precio de salida de 60M€, cuando hace menos de un año estaba en 80M€. Tras la final de la Champions, Marcelo tenía un valor de mercado de 70M€, cuando ahora mismo no pasa de los 25M€. Ramos ha pasado de valer 45M€ a 25M€, James de 80M€ a 50M€ (militando en el Bayern), Asensio de 90M€ a 60M€, Carvajal de 60M€ a 50M€, Casemiro de 70M€ a 60M€ y Varane de 80M€ a 70M€. En total, el Real Madrid ha perdido 235M€ en un solo año.
Esta situación evidencia los problemas que está encontrando el club para poder dar salidas a ciertos futbolistas con los que la idea era hacer caja para afrontar la importante inversión realizada este verano. El resto de clubes europeos son conscientes de la devaluación de estos jugadores y de la necesidad del Real Madrid respecto a las ventas, por lo que las ofertas que vienen son escasas e insuficientes.
Para poder entrar, primero hay que dejar salir, un hecho que puede complicar la llegada de Paul Pogba. El francés no dejará Manchester por menos de 150M€ y el Fair Play Financiero obliga al Real Madrid a vender para dar luz verde a ese fichaje, por lo que se hacen imprescindibles algunas ventas para poder equilibrar la balanza. No será fácil…