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REAL ZARAGOZA

"Nos planteamos una masiva reconstrucción del equipo"

Víctor asegura que tienen mucho trabajo por delante y matiza que la solución está en más de dos o tres jugadores, pero que le gustaría que continuaran bastantes futbolistas de la actual plantilla.

Zaragoza
Víctor Fernández.
ALFONSO REYES

—Ha entrado Torras en la convocatoria y viajan tres porteros. ¿A qué se debe?

—También puede haber una alteración de última hora. Álex Muñoz tiene unas molestias y si no está en condiciones no viajará y lo haría Jesús Álvarez. Lo de los tres porteros es más por precaución por si surge algún problema. Tanto Ratón como Cristian están en perfectas condiciones.

—¿La presencia en el once de Ratón en el último partido tiene algo que ver con la continuidad de Cristian?

—No hay nada de eso. Yo lo hablé antes con Cristian y le dije que ha tenido un compañero extraordinario dentro del grupo, que le ha estimulado a trabajar y a superarse cada día, que ha tenido un comportamiento extraordinario en el banquillo y que ha sido un elemento activo integrador y positivo. Y además de eso es un chico que tiene muy buenas condiciones para defender la portería del Zaragoza. Yo me siento tranquilo cuando juega Ratón. Era darle ese premio a un jugador que tiene que soportar una competencia durísima con Cristian, que es un grandísimo portero, y no hay nada en esa decisión relacionado con el futuro de Cristian. De hecho, yo estoy convencido de que Cristian sigue al 100%, pero como el fútbol es muy raro, igual te viene un equipo y te paga la cláusula. Entonces habría que darle las gracias por todo lo que ha hecho por el Zaragoza y seguir avanzando, pero no es el caso. La decisión era por lo que he dicho y en Tenerife va a volver a jugar Ratón.

—¿Cómo afrontan este partido?

—Tenemos que salir a por la victoria y terminar de la mejor manera posible. Está en juego el prestigio de la clasificación y también una compensación económica en función del puesto en el que termines. No podemos renunciar a absolutamente nada de lo que es el tema económico. Habrá cinco o seis cambios respecto al partido contra el Numancia y esperamos hacer un buen partido y tener la ambición de ir a buscar la victoria. Teóricamente da la impresión de que va a ser un partido relajado, pero seguro que ellos querrán despedirse de sus aficionados con una victoria. Y nosotros también queremos despedirnos con un triunfo.

—Se está hablando mucho del futuro de Soro y de Pombo. ¿Tiene alguna recomendación para ellos?

—Aún no debo entrar en la individualización porque hay un partido por delante. Lo único que puedo decir es que nos planteamos una reconstrucción masiva del equipo y que tenemos mucho, mucho trabajo por delante. Debemos optimizar al máximo los recursos que tenemos y encajar muchas piezas del puzle, ya que dentro del propio grupo tenemos muchas dificultades con jugadores que están saliendo de lesiones que nos pueden condicionar la planificación. Por ejemplo, atrás ya tienes de salida dos jugadores con rotura de ligamentos y van a acumular un año sin jugar. Son muchas cosas las que tenemos que encajar y, por tanto, no voy a entrar en el tema de análisis individual de lo que procede con cada jugador porque no sería lo más inteligente. Ya he anticipado que tenemos muchísimo trabajo por delante, que debemos ser muy eficaces y que necesitamos una reconstrucción masiva del equipo y así lo entiende el club, que es lo importante.

—¿Con qué porcentaje de la plantilla se daría por satisfecho al comenzar la pretemporada?

—No lo sé porque yo no estoy acostumbrado a esto. Sí que estoy acostumbrado a los tiempos en Primera, pero no en Segunda. Aquí juegas con los recursos económicos, con las ilusiones y ambiciones de jugadores que antes de jugar en Segunda prefieren ir a Primera, también con la ambición de jugadores que quieren ir a otro fútbol donde pueden tener unas ganancias económicas que no han hecho anteriormente… Juegas con muchos factores. Yo lo único que tengo que hacer es no ponerme nervioso, tener serenidad y vuelvo a decir que son muchas cosas las que hay que encajar en el puzle, tanto de entradas como de salidas, y eso nos va a llevar un tiempo, pero estamos en la buena dirección, se están dando los pasos que se tienen que dar y poco a poco iremos reconstruyendo esto que he dicho anteriormente.

—¿Qué ha fallado esta temporada?

—Ha habido un punto de partida muy desgraciado en cuanto a lo que es el tema de las lesiones. Además, el segundo año para la gente que es novedad es el año difícil y eso también lo ha sufrido el equipo. Las nuevas incorporaciones tampoco han encajado como todo el mundo esperaba. Son muchos factores y no sólo nos ha pasado a nosotros, también a otros equipos como el Numancia, que ha pasado de ser casi un equipo de Primera a estar luchando por la permanencia. Creo que la temporada nos ha dado unas enseñanzas importantes para no volver a incurrir en esas situaciones. La Segunda es muy larga y complicada y hay que estar preparados para ser más regulares. Hay muy pocos jugadores en Segunda que sean capaces de jugar 35 partidos a un nivel de regularidad notable. Muy pocos. Y nosotros hemos tenido muy pocos jugadores este año que sean capaces de jugar 35 partidos con un nivel de regularidad alta. Por tanto, debemos estudiar qué factores no han permitido encontrar ese punto de regularidad. Yo me doy por satisfecho con que en la próxima temporada tenga muchos jugadores que sean capaces de jugar 25 ó 30 partidos a un buen nivel. Hemos sido muy irregulares a nivel colectivo y hemos sido muy irregulares a nivel individual, con muchos altibajos. Es algo que debemos corregir y también hay que lograr que jugar en Zaragoza sea muy difícil, al margen de que hay una fotografía muy clara en el equipo de qué es lo que necesita y qué es lo que tenemos que aportar en el mercado que nos ayude a crecer. Lo que no sé es hasta dónde nos permitirá crecer, pero vamos a crecer seguro.

—¿Hay algún futbolista al que considera intransferible?

—A mí me gustaría que continuaran bastantes jugadores a los que creo que el próximo año les puedo ayudar a crecer. Yo lo único que digo es que el peor error que cometeríamos sería malvender. Eso sí que sería una marcha atrás terrible para nosotros, pero no es el caso y espero que si se tiene que vender que sea porque pagan la cláusula o llegue una oferta económica que nos permita hacer más poderoso el grupo. Todos los entrenadores del mundo tienen una serie de jugadores dentro del grupo a los que les dan un valor muy especial y yo no soy la excepción, pero lo más importante es no malvender.

—¿Cómo se explica que diga que hay que hacer una reconstrucción masiva y al mismo tiempo que le gustaría que continuaran bastantes jugadores?

—Una reconstrucción masiva no es quitarte 15 jugadores de 25. He utilizado esa frase como podría haber dicho que necesitamos cambios para la próxima temporada. Reconstrucción masiva es que necesitamos una salida y una llegada importante de jugadores. La solución no pasa por dos o tres jugadores, pasa por bastantes más. Hay que buscar un equilibrio y ver qué es lo mejor para los que están, los que tienen contrato, los que pueden llegar… Por eso digo que hay mucho trabajo por delante y no quiero dar nombres porque la dirección deportiva está trabajando en esa línea y hay que encontrar las soluciones, que no las vas a encontrar de hoy para mañana. Hay que tener calma y no ponerse nervioso.

—¿Teme empezar la Liga algo cargado al estar implicado en la confección de la plantilla?

—No, porque dentro de unos días me iré de vacaciones y con diez o doce días me resultará suficiente. Y luego soy una persona que me ilusiono rápido. En el momento que vea cosas concretas que están ocurriendo en torno a lo que es la estructura de la plantilla de futuro y que se están dando soluciones a los jugadores, yo me ilusiono muy rápido. Ahora estoy cansado porque para mí ha sido muy duro, pero como ya se ha conseguido el objetivo, estoy tranquilo.

—¿Qué supone para usted llegar a este partido con el objetivo cumplido?

—Lo que yo percibo es que la temporada se ha hecho muy larga para mucha gente y hay jugadores que han tenido que hacer esfuerzos y que les hemos tenido que apurar en momentos críticos del año porque eran muy necesarios, como es el caso de Guitián y James en las últimas semanas. Yo siento que hemos llegado justos, pero como hemos conseguido el objetivo eso se confunde con la calma, la relajación y la ‘satisfacción’ de que ya no nos va a ocurrir nada malo, pero tenemos una obligación, que es que defendemos una camiseta y un escudo, que tenemos que hacer muy buen partido y con esa intención voy. Tenemos la voluntad de ganar. Aparte de que voy a hacer muchos cambios porque estamos muy justos y hay que dar opción a jugadores que han llevado muchas semanas lesionados y comprobar que ya están recuperados, voy a Tenerife con la ilusión de ganar y ver comportamientos.