"La temporada ha sido mala y ojalá nos sirva para aprender"

—La permanencia ya es matemática. ¿Respiran más tranquilos?

—El sábado ya fue un desahogo importante para todos porque lo hemos pasado mal y ha sido una temporada difícil. Nos quedan dos partidos para intentar quedar lo más arriba posible, pero el objetivo primordial que me encontré cuando llegué en Navidad está conseguido. A nadie nos ha gustado esta temporada y esperemos que nos sirva para aprender de cara a la siguiente.

—¿Qué ha fallado esta temporada?

—Cada uno tendrá sus propios pensamientos acerca de lo que se ha hecho mal. Cada uno tiene que mirar su ombligo y ver en qué cosas debemos mejorar, pero creo que eso tiene que quedar dentro del vestuario y el míster marcará las pautas para mejorar el año que viene.

—¿Llegó a temer en algún momento por el descenso?

—Hemos estado cerca de esos puestos y lo hemos pasado mal. Estar en esa zona no nos gusta a nadie y desde luego que hemos tenido la preocupación y hemos sido conscientes de que nos jugábamos muchísimo porque estábamos donde estábamos.

—¿Un profesional cómo afronta los dos partidos que restan para finalizar la temporada?

—Primero tenemos un partido en casa con nuestra afición, que ha estado a nuestro lado toda la temporada y se merece que acabemos el año con una gran victoria frente al Numancia. Y el partido de Tenerife, igual. No sé qué se estarán jugando ellos, pero nosotros debemos ser profesionales y dejar al club en la mejor posición posible.

—Estuvo toda la semana con molestias, pero finalmente pudo jugar. ¿Cómo está?

—Llevo unas semanas tocado de aductor, pero mi intención es seguir jugando los partidos que quedan y ayudar al equipo a conseguir estas dos victorias. Estoy mejor, pero aún sigo con esas molestias normales de final de temporada.

—Hubo bastantes críticas a la defensa por la segunda parte de Málaga. ¿Usted qué opina?

—Yo creo que soy una persona exigente conmigo mismo y tengo claro que los despejes no fueron de la mejor manera posible. También hay un factor suerte que a veces cae de tu parte y otras no, pero yo sé que tengo que mejorar día a día, un pensamiento que debemos tener todos los jugadores, para que estas cosas ocurran lo menos posible la temporada que viene.

—A nivel individual, ¿qué balance hace de estos cinco meses en el Zaragoza?

—Estoy contento porque he vuelto a jugar muchos partidos y he podido ayudar al equipo a conseguir el objetivo que me había marcado cuando vine, pero me meto en el equipo y creo que la temporada ha sido mala. No hemos conseguido los objetivos que se marcó el club desde el principio, pero al final el equipo ha competido y ha logrado salvar la situación, que se había puesto muy difícil. Hay que afrontar estos dos últimos partidos de manera profesional, ganarlos y al año que viene empezar con mucha fuerza.

—El zaragocismo está expectante por la decisión que tome Víctor Fernández. ¿Usted qué piensa que va a pasar?

—Nosotros estamos como la afición. Todos los jugadores hemos manifestado que estamos muy a gusto con el entrenador, pero no depende de nosotros. Creo, sinceramente, que sólo va a depender de él y del ánimo que tenga. Todo lo que sea, que sea bueno para el Zaragoza.