El Zhar podría salir del Leganés tras la renovación de Pellegrino
El Flaco apenas ha contado con el marroquí en tres cuartos de temporada. Si no hubiera renovado, el extremo se habría inclinado por la continuidad. Tiene contrato hasta 2020.
La renovación de Mauricio Pellegrino como entrenador del Leganés podría suponer la salida de Nabil El Zhar menos de un año después de que la llegada del Flaco a Butarque fuera factor fundamental para que este extremo marroquí de 32 años renovara dos años más con los pepineros. A El Zhar le queda una temporada de contrato, el 30 de junio de 2020.
La escasa participación del futbolista en prácticamente tres cuartos de temporada (desde el 3 de noviembre ante el Atlético no volvió a jugar más de titular en Liga) es el motivo fundamental por el que El Zhar desea abandonar Butarque.
En caso de no haber continuado Pellegrino, el futbolista habría tenido más opciones de replanteárselo, pero una vez consumada la ampliación de contrato del técnico, lo normal es que el jugador busque un nuevo destino, bien en España, bien en competiciones más exóticas. Sobre su mesa ya hay propuestas de países árabes. Actualmente no cuenta con representante y es él mismo quien negocia cualquier asunto vinculado con su futuro.
Pellegrino, fue básico en su renovación
El caso resulta paradójico. Tras varios meses de contactos entre el Leganés y El Zhar, la llegada de Pellegrino fue el empujón definitivo que necesitó el futbolista para firmar su renovación. Ambos coincidieron en el Liverpool en la etapa del entrenador como segundo de Benítez.
El Flaco le transmitió su deseo de que fuera importante en su proyecto pepinero. Fue así como se consumó un acuerdo que se firmó a falta de sólo cuatro días para que expirara la relación entre el futbolista y el Leganés. El acuerdo llegó el 26 de junio de 2018.
Pérdida paulatina de relevancia
El Zhar comenzó curso con el Leganés como pieza intocable para Pellegrino. De hecho, comenzó muy fuerte en términos goleadores. Anotó tres tantos en las primeas seis jornadas, todos vitales para el equipo. Su doblete permitió evitar la derrota ante la Real Sociedad en Butarque (2-2) y abrió el camino para ganar al Barça en la Avenida de los Once Leones (2-1). Pese a ello, su peso dentro del equipo empezó a disolverse.
Pellegrino cambió de sistema y el uso de sólo tres mediocampistas (5-3-2) convirtió a Nabil en un habitual del banquillo sin presencia regular en el césped. Pellegrino siempre habló bien del marroquí en sala de prensa, pero su perfil, mucho más atacante que defensivo, inclinó al técnico a usar a otros compañeros tanto en la medular (Óscar fue el principal beneficiado) como en el ataque (El Zhar jamás probó como segundo delantero) o en la banda (tampoco se trató su reconversión a carrilero).