El once favorito de Fran Escribá vuelve a estar disponible
Podría presentarlo por primera vez contra el Barcelona. Maxi Gómez lleva ocho jornadas jugando apercibido de sanción.
En los nueve partidos que ha ocupado el banquillo del Celta, Fran Escribá nunca ha presentado la alineación que a día de hoy más le convence. Este equipo no es el mismo que tenía mente cuando aterrizó en Vigo, pero el paso de los encuentros le ha ido ofreciendo respuestas sobre algunos futbolistas. Ahora, a falta de tres jornadas, el valenciano vuelve a tener disponibles a sus once preferidos.
La recuperación de Brais Méndez, que en Leganés reapareció casi un mes después de caer lesionado, y la ausencia de sancionados dejan vía libre al técnico para apostar por su equipo ideal el sábado contra el Barcelona. Una formación titular que como siempre responderá a una distribución táctica 4-4-2.
Rubén Blanco estará en la portería y todo apunta a que la defensa será la misma que en Butarque. De los cuatro zagueros el único indiscutible ha sido Hugo Mallo. Gustavo Cabral y Lucas Olaza no entraron de inicio en los planes de Escribá, que los dejó fuera de sus dos primeras convocatorias. Al central le llegó la oportunidad debido a la fragilidad mostrada ante el Villarreal por David Costas y Wesley Hoedt, mientras que el lateral salió del ostracismo por la lesión de David Juncà. También se ha consolidado Néstor Araujo. El mexicano empezó siendo titular, se cayó dos jornadas del once por el 'virus FIFA' y ha vuelto a asentarse.
En la medular Okay Yokuslu, que cumplió ciclo en Leganés, Stanislav Lobotka y Sofiane Boufal, que descansó por sanción el pasado miércoles en Cornellà, han tenido plaza fija desde el principio. Lo mismo sucedió con Brais hasta que se lesionó. Su puesto en la derecha lo han ocupado Jozabed, Ryad Boudebouz y Andrew Hjulsager. Si el mosense alcanza un buen tono físico, tiene todas las papeletas para jugar de inicio contra el cuadro culé.
La línea que menos discusión admite es la delantera. Sin embargo, llega amenazada a la recta final del curso. Maxi Gómez lleva ocho partidos jugando apercibido. Si es amonestado contra el Barça no podrá estar en Bilbao y en caso de ver amarilla ante el Athletic se perderá la despedida frente al Rayo. Por su parte, Iago Aspas está pendiente de conocer los resultados de las pruebas médicas a las que se ha sometido para examinar el esguince en el hombro derecho que sufrió en Butarque. Su participación no debería correr peligro.