Un derbi de contrastes
La fe del Athletic ante una tempestad por Abelardo (13:00, beIN Sports). La racha del equipo vitoriano es terrible: dos puntos de 18 posibles.
La Liga es tan larga que en unos meses los equipos pueden dar una vuelta como si fueran un calcetín. Y si Mendizorroza alumbró a mediados de diciembre un Alavés ante el Athletic en las antípodas, ahora el paisaje es radicalmente distinto (sigue el partido en directo en As.com). Por entonces el Glorioso era el equipo revelación, hasta discutía el poderío de los grandes. El Athletic acababa de mudar su banquillo y Garitano trataba de salir del infierno. En esta segunda vuelta, en el tramo final de la campaña, en el equipo babazorro se ha desatado una tormenta por un nuevo desencuentro entre el máximo accionista, Querejeta, y el inquilino del banquillo, y en San Mamés gobierna la paz y la ambición. Los leones tienen casi seguro ser séptimos y hasta miran el desafío de la sexta plaza para evitar el engorro de las tres previas a partir del 25 de julio.
El derbi mide dos dinámicas diferentes pero el reclamo de la séptima plaza está vigente para Athletic y Alavés. Este llega con bastantes bajas. No tiene sancionados (Brasanac está al borde con cuatro amarillas) pero sí muchos lesionados: Burgui fue operado de ligamento cruzado anterior, Maripán tuvo un esguince y ahora es edema, Rodrigo Ely tiene molestias en el cuádriceps y Rolan una rotura de fibras. Claro que Garitano está sin Capa, Yeray y Dani García (además de Ibai), tres jugadores clave en su juego defensivo.
Ante la ausencia de Yeray y por la sanción a Nolaskoain por tarjetas en el filial, entra Vivian. Se trata de un central rocoso, de la generación del 99, con buen juego de cabeza. Es vitoriano, fichado del Santutxu y renovado hasta 2021, con 30 millones de euros. Es uno de los llamados a hacer la pretemporada con el primer equipo.
Lo normal es que, tras el experimento ante el Barcelona con tres centrales, Abelardo retome el tradicional 4-4-2. La gran duda estriba en si Pacheco está en condiciones de saltar al terreno de juego o si se tiene que ir a la grada. Se torció un tobillo el martes ante el Barça y, aunque en el club son optimistas, viajó el portero del filial Álex Domínguez. Si tiene malas sensaciones, Sivera ocupará la portería.
La racha del equipo vitoriano es terrible: dos puntos de 18 posibles. Empates en casa con Leganés y Valladolid y derrotas con Atlético, Sevilla, Espanyol y Barcelona. No hay nerviosismo porque la permanencia está certificada. Otra cosa es que crezcan las suspicacias, ya que el destino del Pitu parece ser el Betis, conjunto inmerso en la lucha por una plaza europea. Como el Alavés.