La directiva de la Federación de Irlanda dimite en bloque
Un caso de irregularidades financieras tras revelarse un préstamo a corto plazo del expresidente John Delaney ha obligado a esta medida drástica que ha llegado al Parlamento.
El ministro irlandés de Deportes, Shane Ross, anunció este miércoles que toda la junta directiva de la Federación Irlandesa de Fútbol (FAI) presentará su dimisión por un caso de irregularidades financieras que afecta a su máximo exdirigente John Delaney.
Delaney abandonó su cargo de consejero delegado de la FAI el pasado marzo, después de que el dominical "The Sunday Times" revelase que en abril de 2017 el mandatario concedió a la Federación un "préstamo a corto plazo" por un valor de 100.000 euros para hacer frente a un problema temporal de liquidez, según explicó él mismo. Tras dejar la dirección de la FAI, Delaney asumió la vicepresidencia ejecutiva, aunque también se ha visto obligado a dimitir de este puesto a medida que ha ido creciendo la polémica, que ha llegado a ser investigada por un comité especial del Parlamento de Dublín.
Ross, político independiente, afirmó este martes en la Cámara Baja irlandesa que se siente decepcionado por el "comportamiento" de los miembros de la junta directiva federativa durante estas pesquisas, en las que parece que "fueron incapaces o no quisieron" responder a "preguntas básicas". "Sigue habiendo preocupación por el tema de la transacción financiera (el préstamo de Delaney) y por la actuación del gobierno corporativo, que sugiere que está lejos de arreglarse", señaló el ministro de Deportes.
El titular del ramo destacó que la junta directiva FAI le ha escrito en "las últimas horas" para comunicarle que ha tomado "medidas decisivas", entre las que figura su decisión de dimitir en bloque. "Creo que ahora deben convocar una reunión general extraordinaria para antes de julio, tan pronto como las investigaciones en curso han concluido, para facilitar la transición hacia una nueva junta elegida en unas elecciones transparentes", agregó Ross.
Después de conocerse este escándalo financiero, la organización estatal Sport Ireland suspendió los subsidios públicos que recibe la FAI, que suman casi tres millones de euros anuales, una inyección de dinero que no reactivará hasta que se aclare este asunto.
Hasta la fecha, las auditorías efectuadas, tanto internas como independientes, han detectado irregularidades en la contabilidad de la FAI, al tiempo que algunas de sus acciones han violado supuestamente secciones de la Ley de Empresas irlandesa de 2014.
Incluso el primer ministro irlandés, el democristiano Leo Vardakar, intervino hoy en el Parlamento para exigir que se aclare la situación económica de la Federación, ante la preocupación que "comparte -dijo- con los fans y los contribuyentes".