CUARTOS | LIVERPOOL 2 - OPORTO 0
El Oporto clama contra el VAR por no expulsar a Salah
En Portugal se llevaron las manos a la cabeza por dos polémicas jugadas en las que Mateu Lahoz y Gil Manzano pudieron equivocarse.
El partido de ida de los octavos de final de la Champions League entre el Liverpool y el Oporto (2-0) trajo consigo mucha polémica. Y es que hubo dos acciones que perjudicaron al club portugués, o al menos eso es lo que piensan en Portugal.
En una jugada, Mohamed Salah estaba pugnando un balón con Eder Militao. Mientras tanto, el balón se le quedó un poco largo y al estirar la pierna para ir a controlarlo apareció Danilo para despejar. En ese momento, con el centrocampista luso cayendo al suelo, el egipcio acabó propinándole un plantillazo bastante peligroso en la espinilla que podría haberle hecho mucho daño. A pesar de que Mateu Lahoz se encontraba cerca, decidió pitar falta pero no mostró ni si quiera una tarjeta amarilla, cuando podría haber expulsado perfectamente al jugador. De hecho, Felipe, el central del Oporto, piensa que si hubiese recurrido al VAR le hubieran mandado a vestuarios: "No me gusta mucho hablar de esto después de los partidos porque todo el mundo se equivoca, pero la entrada sobre Danilo fue peligrosísima. El árbitro no vio la jugada, porque si hubiera ido a ver el vídeo, Salah habría sido expulsado".
Y además, durante el partido, el videoarbitraje no concedió la pena máxima tras tocar Alexander-Arnold el balón con la mano cerca de la línea de fondo. Gil Manzano, encargado del VAR, no señaló penalti y la afición del Oporto se llevó las manos a la cabeza. Incluso Iker Casillas, en su tuit animando a la afición tras el partido, colgó las dos imágenes polémicas que para ellos determinaron el signo del encuentro.