Joaquín busca recuperar su rol más desequilibrante
Quique Setién trabaja con la posibilidad de devolver al portuense a zonas más ofensivas tras varios encuentros jugando como carrilero
Joaquín está respondiendo de forma notable a las exigencias en esta temporada y su rol de cara a las diez últimas jornadas de Liga puede ser decisivo en la búsqueda de un billete europeo que dé continuidad al proyecto de Quique Setién. El portuense se alejó de la zona de ataque durante el último mes y medio de competición y su capacidad para marcar diferencias entre líneas disminuyó pese a su potencial como carrilero. El técnico quiere que Joaquín tenga el mismo perfil desequilibrante del inicio de campaña y por ello podría darle de nuevo libertad en tres cuartos.
A sus 37 años, Joaquín ya superó este curso los dos mil minutos y es una de las bazas de mayor desborde que tiene la plantilla verdiblanca en el presente. Sumó cinco goles y tres asistencias, pero el último tramo de competición minimizó su mejor versión debido a las necesidades del técnico de contar con él en el lateral derecho. Su renovado papel también incidió en otras piezas del equipo: el rendimiento de Lo Celso disminuyó al alejarse del portuense en niveles de asociación y también quedó presente más falta de desequilibrio en los últimos metros. Su figura, mientras, queda más controlada por los rivales cuando aparece desde el carril diestro.
El sprint final de Liga supone un desafío renovado para Joaquín. Tras su renovación del pasado curso hasta 2020, encara la antesala de la que podría ser su última campaña en Heliópolis bajo la incógnita si Europa servirá de escenario de nuevo para su protagonismo. Su alianza con Setién es sin duda el principal aliciente que invita a pensar en un futuro con peso específico en este equipo verdiblanco.
