Solari con Bale: la misma encrucijada que tuvo Zidane
El francés diseñó su once sin el galés. El argentino va por el mismo camino. Uno tiró de Isco para suplirle y el otro apuesta ahora por Lucas Vázquez.
Bale atraviesa otro capítulo crítico de su carrera. Y esto ya lo ha vivido antes. Esta temporada roza su media de juego. Ha disputado 27 de los 54 partidos del equipo, es decir, el 50%. Las lesiones, su cruz, también le han perseguido este curso: en enero de este nuevo año se lesionó del sóleo, su lesión número 22 desde que aterrizó en el Madrid. Y para colmo, su puesto en el once también se ha visto comprometido. El galés se quedó fuera del once inicial de Solari ante el Barcelona, el partido más importante del equipo hasta la fecha, y podría quedarse también sin un hueco en la alineación titular ante el Atlético en el Metropolitano (16:15 horas, beIN LaLiga). Con Zidane, la pasada campaña, ya le ocurrió algo similar. El francés encontró un once sin Bale y Solari va por el mismo camino...
Zidane no contó con Bale en la parte decisiva de la Champions. Desde octavos y hasta la final, Bale disputó cinco de los siete partidos posibles. Pero sólo jugó uno desde el inicio, ante la Juventus. El Madrid perdió ese encuentro de semifinales en el Santiago Bernabéu (1-3). Al descanso, con 0-2 y la eliminatoria en vilo, Zidane le quitó del campo y puso en su lugar a Asensio. Esa misma semana se quedó sin jugar un sólo segundo ante el Málaga en Liga. Zidane se hartó de Bale y se decantó por Isco, que le arrebató el puesto, para jugar con un 4-4-2. El malagueño jugó de inicio los partidos de ida ante PSG, Juventus y Bayern de Múnich. Todas ellas las empezó Bale desde el banquillo. Y en la final, ante el Liverpool, ocurrió lo mismo, aunque las portadas se las llevó Bale, que marcó dos golazos.
Esta situación, la de perderse partidos importantes y ver cómo otro compañero ocupa su hueco, Bale también la siente en estos momentos. Pero no es con Isco, que también atraviesa un bache complicado con Solari, sino con Lucas Vázquez, que desde la llegada del argentino al banquillo madridista ha disputado 19 de los 24 partidos posibles (el 79% del total). El gallego se ha adueñado de la banda derecha del ataque madridista, acompañado por Benzema y Vinicius. Pero Bale no sólo ha visto el asentamiento del canterano blanco en ataque, sino que también ha vivido desde el dique seco el ascenso del brasileño en la izquierda, su aparente posición antes de llegar al Madrid. Y una de las razones la apuntó Solari en una de sus primeras rueda de prensa en el Madrid. "Lo que tiene que hacer es comerse el escenario cada vez que juega", apunto el técnico argentino.
El año 2019 está siendo la confirmación de que Solari no cuenta con Bale. Primero, por las lesiones. Ante el Villarreal, tras el descanso del partido, no saltó al campo. Una lesión en el sóleo, su octava en esa parte del cuerpo, le dejó fuera de los terrenos de juego seis partidos. Desde su regreso, ante el Girona en la vuelta de los cuartos de Copa, ha participado en cuatro partidos. Sólo en uno salió como titular (ante el Alavés en el Bernabéu) y no lo terminó. Y segundo, por las decisiones de Solari. De estos cuatro partidos ya recuperado, en tres entró desde el banquillo. Así le ocurrió ante el Barcelona el pasado miércoles, el partido más importante del equipo hasta ahora. Y su participación en el Clásico, el primero de este nuevo rally, fue muy discreta: sólo tres pases en campo contrario en 26 minutos de juego.
Su relación con Ancelotti
Con Ancelotti tampoco tuvo un camino de rosas. La relación de Bale con el italiano terminó mal. Casi en un despido del entrenador. Carletto prefería a Di María, colocado a veces por la derecha y otras de centrocampista. El argentino se marchó del Madrid en 2014, por todo lo alto y clave en la Décima. Pero hubo una fecha clave: ante el Valencia, el 4 de enero de 2015. Ancelotti sentó a Bale en Mestalla y el Madrid perdió ese partido. Y, como desveló Carlo en su libro Liderazgo tranquilo: ganando corazones, mentes y partidos, esa noche Florentino le llamó para pedirle explicaciones. "Desde entonces, la relación no volvió a ser la misma", confirmó el actual técnico del Nápoles. Poco después de aquello a Ancelotti le despidieron.
