El Real Madrid busca más a Vinicius que a Bale
El Madrid ‘percutió’ ante el Alavés por la izquierda (el ala de Vinicius) el 44% de sus ataques, por el 29,4% de los ataques por la derecha, zona de Bale.
Vinicius (18 años) ha pasado de promesa a solución. Asentado en la izquierda e involucrado en el juego colectivo, sus compañeros ya le buscan más que a Bale (29 años). Es lo que sucedió contra el Alavés, donde ambos compartieron titularidad pero no trascendencia en el equipo. Mientras que el brasileño protagonizó casi todo lo bueno del Madrid (participó en un gol, marcó otro, fue el que más regates buenos hizo con cinco...), el galés fue un islote en la derecha (con 22 fue el que menos pases dio del Madrid, no hizo ningún regate bueno, no recupero ningún balón...). Esto hace que el equipo cargue ya el juego más en Vinicius que en Bale.
La estadísticas lo reflejan. El Madrid ‘percutió’ por la izquierda (el ala de Vinicius) el 44% de sus ataques, por el 29,4% de los ataques por la derecha, la zona de influencia de Bale. El dato es de la primera parte, antes de que el galés cambiara la banda con el brasileño. Decisión “del míster (Solari)”, como recalcó Vinicius y confirmó el propio técnico argentino.
La matriz de pases, es decir, cómo se pasan el esférico entre sí los jugadores, muestra un gráfico en el que Benzema, Vinicius y Ceballos se buscan para pases y hacer paredes… y Bale está aislado. Vinicius recibió 54 pases (uno cada 1,6 minutos), el británico, sólo, 25 (uno cada 2,5).
La clave interpretativa es Benzema. El engranaje del ataque tiene más química con la frescura de Vini que con el 11 madridista. Le dio a Vinicius nueve pases, a Bale, únicamente dos (solo estuvo 12 minutos más en el campo con Vinicius).
No fue cosa sólo del nueve, el jugador más en forma del Madrid. Por detrás, es lo mismo. El centro del campo siguió la misma tendencia. Vinicius recibió del triángulo Casemiro-Modric-Ceballos 20 pases y Bale muchos menos, ocho…
Una radiografía que revela la desconexión de Bale en esta BBV que ha experimentado Solari en perjuicio de Lucas Vázquez, su hombre de confianza para la derecha. Bale sigue siendo, para bien o para mal, un verso suelto.